Volkswagen Navarra cerrará 4 días durante el mes de septiembre por falta de piezas debido "a las inundaciones sufridas por una proveedora en Eslovenia", informa la dirección. Los días de cierre previstos son el 15, 18, 22 y 29 de este mes.

La empresa alemana tiene previsto solicitar un ERTE de fuerza mayor para que el pago a los trabajadores corra a cargo de las arcas públicas durante los días de cierre. Confía en que sea acordado con el comité, si bien ha precisado que, en caso contrario, lo aplicará de forma unilateral.

La dirección ha admitido que tiene un acuerdo firmado para los días de cierre del segundo semestre, pero argumenta que se alcanzó en una coyuntura distinta a la actual. El comité en su conjunto ha reclamado que se cumpla lo firmado y se paguen los 200 euros pactados.

UGT y CCOO, que forman mayoría en el comité, han asegurado que van a informarse si este ERTE "tiene cabida" y que, en caso de acordarlo, tendrá un mayor coste para la empresa que acuerdos anteriores.

Las instalaciones de un proveedor clave de piezas para los motores del Grupo VW han sufrido importantes daños por las recientes riadas, que han obligado a paralizar la producción. Faltan engranajes para los motores de combustión. La dirección de la planta navarra ha convocado este martes por la mañana al Comité de Empresa para informar de los efectos que tendrá este contratiempo. También se han visto perjudicadas plantas como la de Palmela en Portugal o las alemanas de Emden, Wolfsburgo o Hannover.

Según ha explicado la dirección, el 25% de la producción de Volkswagen Navarra no usa la pieza afectada y, en estos momentos, la firma dispone de existencias para un 45% más de producción. "Esto significa -explicaba ELA en una nota a sus afiliados- que se producirá un 70% de los coches previstos, tres o cuatro días a la semana".

La empresa ha asegurado que han buscado a un antiguo proveedor y que, además, confían en que el flujo de suministro pueda estar recuperado para finales de octubre, por lo que el próximo mes podría haber nuevos días de paro".

La producción en la fábrica de ensamblaje de Palmela parará desde el 11 de septiembre y hasta el 12 de noviembre porque faltan componentes esenciales para la producción del T-Roc.

Además, Volkswagen va a interrumpir dos turnos de producción en la fábrica de Emden, en Baja Sajonia, al noroeste de Alemania, desde el 11 de septiembre y hasta el 1 de octubre. Eslovenia sufrió en agosto unas inundaciones que han afectado a dos tercios del país.

La dirección de Volkswagen convocó este lunes a los sindicalistas a una reunión en Alemania para trasladarles en primera persona información acerca de las inversiones previstas en la fábrica y la decisión acerca de la planta de ensamblaje de celdas de baterías. Hyundai Mobis ya anunció en agosto un acuerdo con Volkswagen para ensamblar las celdas, que serán fabricadas por el grupo Volkswagen en su gigafactoría de Sagunto. Esta labor de montaje final, en lugar de realizarse en el interior de las instalaciones de Volkswagen, se llevaría a cabo en una nueva nave que se levantará en Imarcoain y que gestionaría el grupo coreano. De este modo, Volkswagen se ahorraría la inversión, y el coste por cada trabajador será también inferior. Con suerte, se regirán por el convenio del metal, uno de los mejores de la comunidad, pero con salarios inferiores a los que se pagan en Volkswagen Navarra.

La subcontratación del montaje de una pieza clave del nuevo coche eléctrico, que se lanzará a partir de 2026, genera inquietud en el comité, que se siente engañado y que, asimismo, considera que no se hace justicia con el esfuerzo de la plantilla más productiva del grupo. Volkswagen por su parte, argumenta que no va a invertir “de más” en aquellas plantas que tienen asegurado su empleo, como a su juicio es el caso de Volkswagen Navarra. “Desde 2026 –explicó esta semana la dirección local– tenemos asegurado trabajo para los tres turnos cinco días a la semana”.

El comité quiere, sin embargo, certezas más próximas. En primer lugar, relativas a este mismo otoño, porque la dirección ya ha anunciado problemas se suministro debido a unas inundaciones en Eslovenia; posteriormente, referentes a las producciones de 2024 y 2025, que se preveían muy bajas y que parecen haber mejorado. Y, finalmente, sobre la exclusividad de fabricación de los vehículos eléctricos, que aportaría un plus de estabilidad. 

Recursos Humanos de Volkswagen se compromete a negociar con la dirección de Pamplona

El presidente del comité de empresa de Volkswagen Navarra, Alfredo Morales (UGT), ha apuntado que en la reunión se trasladó a Recursos Humanos una serie de reivindicaciones consensuadas por el comité, como la necesidad de abrir un proceso negociador "que no se dilate en el tiempo" y que contemple tanto un el Pacto por el Futuro como un convenio colectivo para 2024, 2025 y 2026, que serán años de bajas producciones por la transformación al vehículo eléctrico.

Y, sobre todo, ha agregado, hay que negociar sobre "cómo vamos a transitar ese tiempo y qué garantías vamos a tener a partir del año 2026" en la planta pamplonesa.

"Esto es lo que hablamos y esto es lo que les pedimos, algo que ya el comité viene reclamando desde hace mucho tiempo, pero informándole y dejándole claro al Grupo que estamos en un punto y en un tiempo límite", ha insistido Morales, quien ha indicado que el comité ya ha solicitado una reunión a la dirección navarra "para iniciar este proceso".

Morales ha destacado que, para "más incertidumbre", a esta situación se suman los ya referidos daños sufridos por las inundaciones por un proveedor de Eslovaquia del Grupo Volkswagen, lo que supondrá una bajada de producción de más de 100.000 coches en las plantas de Portugal y Alemania, y en otras como las de Martorell o Pamplona.

"También tenemos que lidiar con este asunto y en este momento estamos en el punto de exigir a la dirección de la empresa que se siente con nosotros para darle un poco de luz a todo esto", ha subrayado.