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Como el café navarro, ninguno

Como el café navarro, ninguno

En Navarra, si preguntas por una marca de café, la primera que te viene a la cabeza es Mocay. Desde hace más de 70 años, los navarros disfrutamos de “nuestro café”, que se produce cada día muy cerca de donde vivimos. Una marca histórica de la región, propiedad de la empresa familiar Pascual (2010), que se asienta en un pequeño municipio a solo 10 kilómetros de Pamplona, Tajonar, desde 1953.

En un país donde las relaciones sociales se establecen alrededor de un café, la regionalización de este producto, como el caso de Mocay en Navarra, está adquiriendo cada vez más importancia para los consumidores y los hosteleros. En este escenario, Mocay no ha parado de crecer en los últimos años: con 3 líneas tostadoras en Tajonar, más de 4 millones de kilos de café producidos al año y 27 profesionales trabajando cada día para tener el mejor producto del mercado.

En este sentido, hace tres años tomamos una decisión “valiente” eliminando el café torrefacto de nuestra producción y apostando solo por el tueste natural, buscando la “premiumización” del producto para diferenciarnos en un mercado cada vez más competitivo.

Estamos viviendo un momento dulce donde la creciente cultura de consumo de café fuera del hogar (+1,7%), junto a la mejora de la calidad y la disponibilidad de nuevas elaboraciones de café, están impulsando el mercado español, que se estima que crecerá a un ritmo anual del 5,7 % entre 2024 y 2032.

En Mocay, seguimos apostando por “Dar lo mejor, cerca de ti” con el café de los Maestros, impulsando la economía local desde Tajonar, nuestro pequeño municipio de 350 habitantes, y siendo cada día más sostenibles, caminando hacia la neutralidad climática con la instalación de placas solares en nuestro tostadero y la utilización de materiales compostables para las cápsulas, mejorando así la economía circular de los productos de la marca.

En definitiva, Mocay ha demostrado, desde hace más de 70 años, ser la marca de referencia porque “siempre cae bien en la taza de los navarros”. Ya lo dicen en nuestro pueblo, “como el café de aquí, ninguno”.