Joseba Asiron, candidato de EH Bildu a la Alcaldía de Pamplona, confía en ser la lista más votada en las elecciones del domingo. Según sus cálculos internos, están a 500-1.000 votos de ganar a UPN y adelanta que Carlos García Adanero, PP, “le va a comer terreno” a Cristina Ibarrola. El alcalde del cambio apela a los votantes de Geroa Bai y Contigo Iruña porque “ser primeros es la única garantía” de no depender del PSN, que en 2019 entregó el Ayuntamiento a la derecha. 

A diferencia de 2019, la izquierda va unida y la derecha concurre dividida.¿Os favorece la fragmentación?

–Favorece a Pamplona porque escenifica qué era Navarra Suma: el último intento de la derecha para retener poder. Como no han conseguido los objetivos, la coalición se ha desmoronado y andan a puñalada limpia.

¿Las puñaladas les quitarán votos?

–UPN y PP estaban sobredimensionados porque iban juntos. La derecha no es mayoría y no alcanzará la mayoría absoluta de ninguna manera. Esto abre otras posibilidades.

¿Cuáles?

–Que haya un ayuntamiento progresista. Proponemos el principio democrático básico de que la fuerza progresista más votada tenga la responsabilidad de formar gobierno.

¿Confía en Elma Saiz?

–La decisión que el PSN tomó en 2019 trajo consigo cuatro años de desastre. Durante la legislatura, EH Bildu, Geroa Bai y PSN hemos trabajado codo con codo y le hemos doblado el brazo a la derecha. Ahora ya solo nos queda ser capaces de llevar ese trabajo hasta el despacho de la alcaldía.

No es lo mismo colaborar en la oposición con EH Bildu que apoyar un gobierno liderado por EH Bildu.

–El 94% de las declaraciones de la legislatura se han aprobado con los votos de EH Bildu, Geroa Bai y PSN. Tenemos que hacer un esfuerzo. No podemos mirar a la gente a los ojos y decirles que deben soportar cuatro años más de gobierno de la derecha.

Las encuestas dan a UPN 9 escaños y a vosotros 7. ¿Hay partido?

–Claro que sí. Y los sondeos no reflejan la percepción que veo en la calle.

¿Tienes mejores sensaciones?

–Estamos más cerca que nunca de ser primera fuerza en Iruña. La última vez que UPN se presentó en solitario sacó 31.000 votos. Nosotros, 27.000. EH Bildu va a crecer y Adanero le va comer terreno a UPN. Estamos a punto. EH Bildu tiene la posibilidad real de ser primera fuerza en Pamplona.

¿Cuántos votos y concejales le puede quitar Adanero a UPN?

–Adanero tiene una larga trayectoria política y es muy conocido entre los sectores más derechistas. Le va a quitar un buen pellizco a UPN. 

¿Por qué es importante que EH Bildu quede en primera posición?

–Si quedamos primeros la alcaldía progresista está garantizada. 

¿Por qué el voto progresista se debe concentrar en EH Bildu?

–Porque estamos muy cerca de ser la lista más votada. Si EH Bildu está fuerte, las posibilidades de que haya una mayoría progresista aumentan. Cada voto será bienvenido. 

¿Apeláis al voto útil?

–Invito a toda la gente progresista a que se movilice y vote. Y estaré encantado si ese voto viene a EH Bildu. 

EH Bildu queda primero y UPN segundo. ¿Ofrecerá sus votos al PSN para evitar que usted sea alcalde?

–Espero que no caigan en la tentación. Hacer guiños a la derecha les ha quitado mucho más de lo que les ha dado. El PSN ha anunciado que se votarán a ellos mismos queden en la posición que queden.

¿Entregarán de nuevo la alcaldía a la derecha?

–Hay que ser muy prudentes. Todavía no sabemos cuál es el mensaje ciudadano. La política de pactos debe estar alumbrada por los resultados. No podemos decir ahora palabras de las que nos podemos arrepentir. 

Es muy cauto con el PSN...

–Iruña se merece, como se merece Navarra, un gobierno progresista. No podemos decir que lo que es bueno para Pamplona es malo para el Gobierno de Navarra. Lo que es bueno para uno, es bueno para todos. No podemos mirar a la gente a los ojos y decirle que se tienen que fastidiar y comerse cuatro años más de gobierno de la derecha. No puede ser. 

Ya ha pasado.

–Si vuelve a pasar, el PSN lo pagará muy duro en materia de credibilidad.

¿Cómo les va a intentar convencer?

–EH Bildu ha demostrado ser un compañero de trabajo fiable en Navarra y en el Estado. Por eso, en aquellos sitios donde la gente diga que la responsabilidad de formar gobierno es de EH Bildu, como en Pamplona, esperamos la correspondencia del PSN. 

EH Bildu no permitirá “que la derecha gobierne en Navarra”. ¿Es un cheque en blanco al PSN?

–No. Nosotros hemos planteado un principio democrático básico: que gobierne la fuerza progresista más votada. Y eso vale para Pamplona y para el Gobierno de Navarra.

EH Bildu lidera el bloque progresista en Iruña y el PSN en el Parlamento. Chivite sabe que no haréis presidente a Esparza. ¿Os quedáis sin margen de negociación? 

–No creo en la política de cambio de cromos entre el Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento. Sí creo en el compromiso de apoyar a la fuerza progresista más votada. Para nosotros será válido aunque EH Bildu deba apoyar 50 alcaldías progresistas lideradas por el PSN y obtener solo 5 a cambio.

¿Votarías al PSN para que UPN no ostente la alcaldía?

–No tiene rango que el partido que saca siete concejales renuncie a la alcaldía y apoye a quien tiene cinco concejales porque el que tiene cinco no quiere apoyar al que tiene siete.

Eso es un no

–Eso es un no tiene rango. 

¿Votaría a Geroa Bai o Contigo? 

–Apoyaremos a Geroa Bai y a Contigo en todas las instituciones en las que sean primera fuerza progresista.

El PSN entrega la alcaldía a UPN. ¿Votaréis en contra de Chivite?

–Sería volver a la política de cambios de cromos. Todos los políticos, incluida Chivite, deben tener claro que los ciudadanos de Pamplona no se merecen el castigo de cuatro años más de gobierno de la derecha. 

¿El votante más abertzale entiende la estrategia actual?

–Sí porque tiene bagaje político y sabe que adaptarse es la clave para seguir adelante. Debemos ser conscientes de cuál es nuestro habitat en Iruña. Tenemos el 24% de los votos, no el 51%. Nos tenemos que entender con el resto.

La derecha política y mediática presionará para que usted no sea alcalde. ¿Pedro Sánchez cederá? 

–Madrid es un escenario que se caracteriza por el nerviosismo, la histeria y la sobreactuación con EH Bildu. Pero Pedro Sánchez sabe que somos un apoyo válido, sólido y fiable.

Le recordarán los 44 candidatos de Bildu condenados por terrorismo.

–Puede ceder, faltaría más. Pero Sánchez aguanta los tirones. 

¿La polémica de las listas fue una estrategia gestada por la derecha?

–En 2023, convertir a ETA en el centro de la campaña denota nerviosismo y falta de proyecto político. Yo no sé dónde estaban hace 30 años las 900 personas que conforman las listas de EH Bildu en Navarra. Sé dónde están ahora, dónde yo estoy, en el rechazo de cualquier tipo de violencia. 

¿Las listas le quitan posibilidades de ser alcalde de Pamplona?

–No. Los ciudadanos me conocen y saben que me centro en los problemas reales de la gente: la vivienda, el cambio climático, la movilidad sostenible y la convivencia.

¿GKS influirá en el resultado? ¿Algunos abertzales se quedarán en casa?

–Mantener a todo el mundo contento es imposible. EH Bildu ha pasado de ser una fuerza de resistencia a una opción de gobierno. Hemos dado el salto y esto tiene un coste. Cualquier opinión discordante que pueda haber dentro de tu casa te aporta tanto o más que quien te da la razón en todo. Me motiva que sectores de la izquierda abertzale me planteé sus preocupaciones y desasosiegos.

Si no es alcalde, ¿se quedará los cuatro años en la oposición?

–Después de ser alcalde, decidí seguir cuatro años en la oposición. Y ahora no concibo otro compromiso que Pamplona. No me voy a ir ni al Parlamento, ni al Senado, ni al Congreso, ni a Estrasburgo. Me quedo en Iruña.

¿Es el candidato más comprometido con Pamplona y su gente?

–Ha caído mucho paracaidista que no sabe nada de política municipal. Empobrecen el debate mucho y solo hablan de cuando estaban en el Gobierno de Navarra o elSenado. Y la gente quiere que hablemos de Iruña y de los problemas. De vivienda.

¿Repetirá la foto histórica de 2015 en el balcón del Ayuntamiento con la plaza repleta de gente?

–Que no quepa ni la menor duda porque vamos a ser la primera fuerza.