En la Eurocopa siempre hay partidos de relleno, esos que no crean afición. El Gales-Suiza (1-1) puede ser considerado uno de estos. El empuje y la pelea en busca de la victoria no se puede reprochar a ninguno de los dos equipos que han debutado este sábado en Bakú. Un encuentro que ha nacido tedioso y gris, pero que con el paso de los minutos ha ganado en emoción. Moore y Embolo, los autores de los goles, han contribuido a ello. Un punto para cada equipo que les deja por detrás de Italia, líder del grupo A, que cierra Turquía.

A pleno sol y a una hora poco apropiada para digerir algunos partidos, Gales y Suiza se han estrenado en la capital azerí a medio gas. Los dragones, que en la anterior Eurocopa fueron la gran sorpresa al llegar a las semifinales, han dejado tocar el balón a los helvéticos. La premisa de Robert Page era clara. Robar y salir rápido a la contra, con los centros desde la banda como prioridad. Y aquí ha aparecido el gigante del Cardiff. Kiefer Moore, que no rehuye el choque bajo ningún concepto, se ha sacado un cabezazo impecable al cuarto de hora de juego que ha encontrado la impecable estirada de Sommer. El portero suizo ha firmado una parada de mérito. Acto seguido, en otro remate, Moore ha sufrido una brecha en la ceja. Chapa y pintura. Ha sido lo mejor de Gales hasta el descanso.

No ha tardado en responder Suiza, que poco a poco ha ido haciéndose dueña del partido. Schar, de espuela, ha estado a punto de abrir el marcador, pero Ward ha mandado el balón a córner con los pies. El monólogo del combinado helvético ha continuado, aunque a Embolo y Seferovic, entre otros, les ha faltado hilar más fino cerca del área. El incombustible Shaqiri, un experto en mantener la posesión con un tren superior más parecido al de un receptor de la NFL, rompía con peligro entre líneas, pero Gales tampoco pasaba apuros, esperando el contragolpe apropiado. Poco o casi nada ha mostrado en el primer acto Gareth Bale. Con total libertad para moverse en ataque, el jugador del Tottenham no ha estado cómodo.

Antes de llegar al descanso Suiza ha estado a punto de abrir el marcador. Seferovic la ha tenido tras una buen servicio de Embolo, que le ha dejado solo ante el portero galés. Pero el exjugador de la Real Sociedad la ha mandado fuera. A los puntos, el gol habría hecho justicia, ya que los hombres de Vladimir Petkovic han sido mejores. Tras la vuelta de los vestuarios, el encuentro ha continuado por los mismos derroteros, con los suizos apretando.

Y a los cinco minutos de la reanudación, Breel Embolo no ha perdonado. Primero, el delantero del Borussia Monchengladbach, pura potencia, se ha ido por velocidad de los dos centrales galeses y su disparo desde la frontal lo ha mandado a córner Ward. Acto seguido, tras el saque de esquina, Embolo no ha perdonado de cabeza. Solo en el área pequeña, el atacante suizo ha abierto el marcador.

APARECE EL GIGANTE DEL CARDIFF

Tras una hora sin hacer prácticamente nada, Bale, Ramsey y compañía han espabilado. A balón parado son unos maestros los dragones y el portero suizo no lo ha pasado bien en cada servicio. Ha seguido apretando Gales con más fe que otra cosa en busca del empate. Y en el juego directo ha encontrado premio. Moore se ha elevado a los cielos y de un impecable testarazo ha batido a Sommer a quince minutos para el final.

Desde ese mismo momento el duelo se ha convertido en un toma y daca. Y viendo lo que ha pasado, los suizos pueden dar gracias por no salir de Bakú con una derrota, ya que los galeses han olido a sangre y han ido a por la presa. El VAR ha anulado un gol de Gavranovic en el minuto 85 por un claro fuera de juego tras otra asistencia de Embolo.

FICHA DEL PARTIDO:

GALES: Ward; Roberts, Rodon, Mepham, Davies; Morrell, Allen, Ramsey (mIN. 93, Ampadu); James (Min. 75, Brooks), Moore y Bale.

SUIZA: Sommer; Mbabu, Elveldi, Schär, Akanji, Rodríguez; Xhaka, Shaqiri (Min. 66, Zakaria), Freuler; Embolo y Seferovic (Min. 84, Gavranovic).

Goles: 1-0: Min. 49; Embolo. 1-1: Min. 74; Moore.

Árbitro: Clément Turpin (Francia). Mostró tarjeta amarilla a Schär (Min. 30) y a Mbabu (Min. 63) por parte de Suiza, y a Moore (Min. 47) por parte de Gales.

Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada del grupo A de la Eurocopa disputado en el estadio Olímpico de Bakú ante cerca de 6.000 espectadores.