La tercera mesa del Foro Hiria puso el foco en la sostenibilidad como eje transversal en los proyectos empresariales e innovadores. Eva Gómara, responsable del área de Viveros de CEIN, abrió la sesión destacando que “la sostenibilidad no es un vertical en sí mismo, sino un eje que atraviesa todos los sectores: salud, agroalimentario, digital, entre otros”. En esta línea, explicó que CEIN trabaja con startups desde un enfoque Green Tech para impulsar soluciones vinculadas a la economía circular y el uso eficiente de recursos como el agua y la energía.

En la actualidad, los viveros de CEIN en Noáin y Tudela albergan 45 startups, de las cuales un 31 % desarrollan tecnologías sostenibles. Dos de estas empresas fueron protagonistas de la mesa: Urafex y Grindur.

Íñigo Lasheras, responsable de proyectos e innovación en Uraphex, presentó la tecnología patentada de su empresa para la regeneración y desinfección del agua sin productos químicos. “Solo utilizamos energía limpia. Nuestro objetivo es reducir el consumo hídrico industrial, especialmente en sistemas de refrigeración y agroindustria”, explicó. Según Lasheras, la falta de cultura del agua sigue siendo un obstáculo: “Solo se habla del agua cuando hay sequía. Hay que empezar a considerar su impacto como se hace con la energía”. También subrayó las barreras para entrar en el mercado por la competencia con grandes lobbies químicos y la necesidad de medidas fiscales que apoyen a las empresas que apuestan por tecnologías limpias.

Por su parte, Jesús Castillo, CEO de Grindur, detalló la solución de almacenamiento térmico que permite descarbonizar la generación de calor industrial. “Captamos energía limpia, la almacenamos y la entregamos cuando la industria la necesita. Ofrecemos sostenibilidad, pero también reducción de costes, porque sin eso, esto no tendría sentido”, señaló. Para Castillo, la sostenibilidad es ya una condición de mercado: “A partir de 2027 toda la industria pagará derechos de emisión. Si quieren seguir jugando en un mercado global, deben adaptarse”.

Compromiso sostenible

Ambos ponentes coincidieron en que la innovación no solo es una herramienta técnica, sino también ética y estratégica. “No basta con cumplir la normativa, hay que comprometerse y demostrar rentabilidad”, defendió Lasheras. Castillo añadió que atraer talento especializado también es un reto: “Navarra no tiene tradición en solar térmica, así que hay que atraer profesionales con motivaciones alineadas con los valores del proyecto”.

Eva Gómara cerró la sesión destacando el compromiso de CEIN con la sostenibilidad a través de acciones como la descarbonización de sus propias instalaciones o la creación de un club de inversores que impulsen a las startups en fases tempranas. “Queremos que las empresas del vivero nazcan con la sostenibilidad en su ADN”, concluyó.

Este encuentro dejó claro que la sostenibilidad no es una opción futura, sino una necesidad presente para la competitividad, el cumplimiento normativo y el desarrollo ético de las empresas navarras.