La directora gerente de CEIN, Uxue Itoiz, ofreció un amplio panorama de las iniciativas que su entidad despliega para impulsar el emprendimiento en Navarra, desde el primer impulso hasta la consolidación y el crecimiento de las empresas. “Hoy hemos resumido muy bien todo lo que hacemos en Navarra en torno al emprendimiento”, afirmó, enfatizando un acompañamiento que abarca las distintas etapas del proceso emprendedor.
En primer lugar, subrayó la importancia de fomentar esa “chispa del emprendimiento” incluso en ámbitos donde tradicionalmente no se asocia, como la investigación. Para Itoiz, el emprendimiento no solo es crear empresas, sino también “tener una mentalidad siempre abierta” que permite innovar y desarrollar nuevas ideas. En este sentido, destacó que CEIN cuenta con numerosos programas diseñados para “ayudar a desarrollar ese sentido para emprender”, con un enfoque amplio que va más allá de la mera constitución de una empresa.
Cuando una persona emprendedora decide avanzar y formalizar su idea, CEIN ofrece un soporte adaptado a cada necesidad. La directora remarcó que, aunque muchos programas están sectorizados para responder a los diferentes ámbitos de actividad, “también atendemos a quienes quieren emprender de forma tradicional, fuera de los sectores más innovadores, porque cualquiera con una idea que quiera avanzar puede contar con nosotros”. Este apoyo se traduce en formación, asesoramiento y acceso a recursos específicos que facilitan la puesta en marcha.
En la tercera fase del recorrido emprendedor, el escalado, CEIN pone a disposición infraestructuras específicas, como los viveros empresariales de Noáin y la Ciudad Agroalimentaria de Tudela, que facilitan el crecimiento y consolidación de startups y empresas con recorrido. Además, ofrece un acompañamiento individualizado y cercano: “Lo hacemos de forma casi ad hoc para cada proyecto y emprendedor”, señaló Itoiz, subrayando que este trato personalizado busca crear vínculos de colaboración duraderos y apoyar los procesos de innovación en cada caso particular.
Itoiz puso en valor, a su vez, el ecosistema emprendedor navarro, definido como un conjunto complejo que supera a CEIN o al propio Gobierno foral. “Hablamos de centros tecnológicos, clústeres, y del tejido empresarial”, explicó, destacando la colaboración público-privada real que se vive en la Comunidad. Recordó el papel activo de los clústeres, que han acompañado el foro, y la cooperación directa con empresas, citando el proyecto Impulso Emprendedor como un ejemplo destacado.
Este programa conecta a empresarios que, desde sus inicios como emprendedores, han logrado consolidar industrias importantes, pero que mantienen esa mentalidad innovadora y ese “gusanillo” emprendedor que no desaparece nunca.
Cooperación y acompañamiento
En su intervención, Itoiz también avanzó el trabajo conjunto con el Gobierno de Navarra en el desarrollo del cuarto Plan de Emprendimiento, un proceso que, aseguró, está centrado en “la persona emprendedora”. Este enfoque busca diseñar programas y políticas que respondan a las necesidades concretas y reales de quienes emprenden, tanto en los primeros pasos como en fases más avanzadas.
La directora gerente recuperó durante su discurso conceptos que habían surgido en diferentes intervenciones del foro, como la “incertidumbre, proceso, perseverancia y tolerancia a la frustración”. Además, defendió que el emprendimiento debe ser “con motivación y con valores”, añadiendo la necesidad de que sea “innovador, con apoyo y, sobre todo, con sentido”. Este último aspecto alude a la búsqueda de proyectos que no solo generen actividad económica, sino que también aporten valor social y respondan a retos actuales.
Uxue Itoiz destacó, asimismo, la importancia de la colaboración dentro del ecosistema, promoviendo relaciones entre emprendedores que faciliten el intercambio de experiencias y conocimientos. “Intentamos que se genere esa relación y colaboración entre las empresas del vivero”, explicó, convencida de que el trabajo en red potencia la capacidad de innovación y éxito de los proyectos.
En definitiva, el modelo de CEIN se basa en una estrategia integral y personalizada que no solo ofrece recursos materiales y formación, sino también un acompañamiento continuo y adaptado, favoreciendo que la persona emprendedora se sienta apoyada en todas las etapas de su recorrido. Este compromiso se traduce en un ecosistema robusto y dinámico, donde la innovación, la perseverancia y los valores personales son la base para impulsar el desarrollo económico y social de Navarra.
