Iñigo Martínez no jugará la próxima temporada en el Athletic y su futuro pasa por el Barcelona. El club ha hecho oficial esta mañana la salida del central, que se marcha gratis tras cinco temporadas y media. A través de un vídeo colgado en sus redes sociales, el de Ondarroa se ha querido despedir de la afición. “Esta será mi última temporada defendiendo la camiseta del Athletic”, arranca Iñigo, que explica que su no continuidad en la entidad atiende a la búsqueda de nuevos retos: “Ha llegado el momento de enfocar un nuevo reto deportivo, y así lo siento”.

En clara alusión a los seguidores rojiblancos, este les agradece el cariño que recibió desde su llegada a Bilbao procedente de la Real Sociedad, en el que fue, y sigue siendo, el mayor desembolso en un fichaje realizado por el Athletic en su historia: 32 millones de euros. “Desde mi llegada me habéis hecho sentir como uno de los vuestros. Como un león más. Sabéis que siempre he dejado absolutamente todo lo que tengo en el campo por este escudo, por mis compañeros y por vosotros. Siempre”.

Iñigo Martínez, que jugará la próxima temporada en el Barcelona, un acuerdo que podría ser oficial en los próximos días, admite que “no es fácil dejar mi tierra, mis raíces y las de mi familia. Bizkaia siempre ha sido y será nuestra casa”.

Además, se muestra agradecido a toda la gente que forma parte del club: “No quiero despedirme sin dar las gracias a todos los empleados del club, la gente que día a día hace que nosotros podamos trabajar en las mejores condiciones. Al cuerpo técnico, a mis compañeros y amigos y, por supuesto, a vosotros, afición”. Para terminar, le hace una última petición a la hinchada: “Seguid apretando, apoyando y haciendo de San Mamés la ‘Catedral’ del fútbol. Ha sido un gran placer defender este escudo. Hasta siempre”.

Fichaje

Josu Urrutia hizo frente a los 32 millones de euros de la cláusula de rescisión de Iñigo Martínez en la Real Sociedad para convertir al de Ondarroa en el reemplazo de Aymeric Laporte. Ocurrió el 30 de enero de 2018, solo un día después de que el Manchester City depositara los 65 millones que marcaban a su vez la cláusula del de Agen en el Athletic, que respondió con suma celeridad para hacerse con los servicios de un central de contrastada categoría y fiabilidad. La apuesta pareció segura desde el primer momento y así se ha demostrado en el transcurso de los años. 

El rendimiento de Iñigo Martínez desde su llegada a San Mamés, excepcional, ha superado incluso las mejores expectativas, hasta el punto de hacer olvidar en un abrir y cerrar de ojos al propio Laporte y erigirse durante cinco largos años en el comandante de una línea defensiva que ahora se queda falta de efectivos.

Aitor Elizegi

La directiva de Aitor Elizegi le trasladó una oferta a Iñigo. No le modificaba la ficha y lo compensaba con una serie de incentivos. Estando ya en la antesala del proceso electoral, el jugador prefirió no responder escudándose en el inminente relevo en Ibaigane. Negociaría con los nuevos mandatarios. Es entonces, con la pretemporada en marcha cuando el Barcelona sondea a Iñigo para su captación. Antes del cierre del mercado estival, Jon Berasategi, director general del Athletic, recibe de una persona autorizada una propuesta concreta, quince millones de euros y cinco más en variables para que el jugador recale en el Camp Nou.

Ese movimiento existió, pese a que Jon Uriarte se escudase en que nadie del Barcelona había hablado directamente con él. Lo cierto es que el Athletic no respondió a la oferta. Con el paso de los meses, desde Ibaigane dejaron el caso aparcado. Días antes de la conclusión de marzo, un emisario del presidente efectuó una llamada telefónica al agente de Iñigo, quien no pudo por menos que transmitirle su incredulidad. Acumulaba meses aguardando ese contacto, en concreto desde que Uriarte tomó posesión del cargo. De ahí que el diálogo durase minuto y medio. La decisión de irse estaba tomada desde hace tiempo.