Tras varias semanas leyendo titulares de la película del verano protagonizada por Luis Rubiales, viene un nuevo capítulo de la que parece la historia interminable. Este viernes 15 de septiembre ha acudido a la Audiencia Nacional a declarar por las acusaciones de abuso sexual y acoacciones a Jennifer Hermoso.

Continuando en la línea que llevamos viendo desde el 20 de agosto, el expresidente de la Federación lo ha negado todo, para variar. No ha pedido perdón por lo ocurrido, y es que para él en situaciones así nadie pide permiso. La fiscalía ha pedido una orden de alejamiento para Rubiales de 500 metros a Jenni Hermoso. La abogada de la campeona del mundo señala que Hermoso está muy afectada por el acto “tan humillante” que sufrió.

El domingo 10 de septiembre, el hasta entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol anunció su dimisión y también lo hizo en sus redes sociales. Rubiales asegura que confía en que salga la verdad a la luz. Pero, ¿qué verdad? ¿La misma que se ha dedicado a manipular desde la final del mundial femenino de fútbol? Coaccionando a las jugadoras, hackeando el móvil de Jenni Hermoso, manipulando imágenes y relatando mentiras acerca de lo sucedido.

@noticiasnavarra Las 10 claves de la renuncia de Luis Rubiales: las declaraciones más polémicas del expresidente de la Federación Española de Fútbol #LuisRubiales #JenniHermoso #fútbolfemenino #federaciónfutbolfemenino ♬ sonido original - noticiasnavarra

Esta ha sido la gota que ha colmado el vaso. El propio Rubiales en una de sus intervenciones preguntó sí se merecía tal cacería. Pues sí, Luis, sí. Te la mereces y ya no solo por el beso sin consentimiento a Jenni Hermos, sino por todas tus acciones a lo largo de este tiempo. Esa gestión a la que tú denominas la mejor de la historia del fútbol español. Como dijo mi compañero, Javier Encinas, hace unos meses, “Rubiales nos roba el fútbol y también el dinero”. No solo eso, nos roba momentos tan emocionantes como la victoria de la selección femenina. Porque emborronó la celebración ya antes de finalizar el partido con sus gestos vulgares en el palco, sin importarle que le estuviesen grabando. Pero el momento más bochornoso y ‘unga unga’ fue cuando a pleno grito exclamó que no pensaba dimitir. Todos aplaudieron. Es avergonzante que en pleno 2023 se aplauda a un personaje como él. Una persona que organiza viajes para reuniones inexistentes y así encubrir sus fiestas particulares con encuentros sexuales. Todos han mirado para otro lado, porque seguro que Jenni Hermoso no es su única víctima. Fijo que hay muchas más que coaccionadas han optado por el silencio.

Rubiales ha visto las orejas al lobo al conocerse la noticia de que la Fiscalía se querellaba contra su persona por agresión sexual y coacciones, miles de jugadores se ponían del lado de Hermoso y los medios de comunicación lo fulminaban desde que salieron las imágenes del “piquito”. Pero es que su renuncia no le ha salvado de tener que ir a declarar y que sigamos teniendo más capítulos de esta historia nada agradable.

Al rugido de ‘Se acabó’ varias mujeres y hombres se han aliado con la jugadora de la sección española de fútbol. A diferencia de algunos de sus compañeros de la selección masculina que han dejado mucho que desear en sus desafortunadas declaraciones. Ese apoyo a medias tintas llega tarde y es incompleto. Una lección para el deporte estatal en el que debe quedar claro la necesidad de ir todas y todos a una como en Fuenteovejuna. Para de esa forma evitar los abusos de poder, porque como Rubiales hay muchos. No es habitual ver a Rubiales dando un beso a Morata al celebrar una victoria. Por lo tanto, no es creíble ni la emoción ni sus declaraciones acerca de lo sucedido.

 Este tema lleva a reflexionar seriamente una cuestión. Si todas las mujeres que apoyan a Jenni Hermoso es porque se sienten identificadas y han sufrido alguna situación en la que algún ‘Rubiales’ se les ha cruzado por el camino… Entonces, ¿los hombres que defienden a Rubiales es porque alguna vez se han comportado como él? Es para pensar.