El pasado 22 de noviembre se cumplieron cien años de la fundación del CD Ilumberri de Lumbier. Cien años en la vida de un club dan para multitud de historias y anécdotas, alguna hasta ahora desconocida como la de Jaime Lazcano, el futbolista internacional que jugó con el Ilumberri.

La noticia apareció en las páginas del diario La Voz de Navarra: “Hoy, en el hermoso campo de Lardín tendremos ocasión de presenciar un interesante partido de fútbol. Los encargados de la lucha serán la Unión Navarra de Pamplona y el Ilumberri de esta villa”.

La visita de un club de la capital constituía un verdadero aliciente, más si cabe todavía cuando el corresponsal anunciaba: “Tal vez vengan a pasar en esta varios jugadores rojillos”. Aquel domingo 18 de abril de 1927, la numerosa afición que bordeaba el campo “entre la que destacaban bellas jóvenes lumbierinas” aplaudió con entusiasmo la salida de los dos equipos al terreno de juego.

En el once lumbierino la novedad era la aparición de dos caras nuevas, las de los dos jugadores de Osasuna que acudieron a Lumbier aquel día: Domingo Rey y Jaime Lazcano, el protagonista de este relato.

Según las crónicas de la época, aquella tarde en El Lardín anduvo un fuerte vendaval que determinó el juego de los dos equipos. La primera mitad fue de gran dominio local y acabó con empate a un gol. Pudo adelantarse el Ilumberri con un penalti a favor, pero el propio Lazcano Castañica, según la crónica del partido de La Voz de Navarra, “lo lanzó intencionadamente fuera a petición del público”.

En la segunda parte, con el viento a favor, el dominio correspondió a la Unión Navarra, pero el trío defensivo del Ilumberri “no dejó pasar ni una”. Sin embargo, a pocos minutos del final, la Unión consiguió el gol del triunfo. El gran Pancho Purroy, jugador del Ilumberri y de Osasuna, dirigió “con acierto e imparcialidad” el encuentro en el que reinó la más franca amistad entre los jugadores”.

Después del partido, los dos equipos se reunieron en “fraternal merienda” y acabó esta gran jornada deportiva con un baile en la calle Mayor a cargo de la Banda Municipal.

Cuando Lazcano estuvo en Lumbier era su segunda temporada con Osasuna, donde había debutado a los 15 años. En la siguiente, tras una magnífica campaña en la que fue el máximo goleador con 25 tantos, cinco más que Severiano Goiburu, el internacional y gran estrella del equipo, Lazcano fichó como profesional por el Real Madrid. Este fichaje le permitió además, continuar en Madrid con sus estudios de Medicina, que había comenzado en Zaragoza, desde donde se desplazaba a jugar con Osasuna, que le pagaba los viajes y la merienda después de cada partido.

Jaime Lazcano, tercero por la derecha, entre Yurrita (Real Sociedad) y el también navarro Seve Goiburu (Osasuna), el 15 de mayo de 1929, antes del histórico triunfo de España ante Inglaterra (4-3).

Ídolo en el Real Madrid

Rápido, hábil y certero extremo derecho, el joven jugador navarro pronto se convirtió en un ídolo para la afición madridista. Su fichaje por el Real Madrid coincidió con los posteriores de otros jugadores: El Divino Zamora (Español), Quincoces, Errasti y Olivares (Alavés) o Luis Requeiro (Real Unión) con los que se formó un gran equipo. Con ellos, Lazcano logró dos Ligas en las temporadas 31-32 y 32-33. Las dos primeras del equipo blanco y las dos únicas con su antigua denominación de Madrid Football Club. Con la llegada de la República, desapareció el título de Real. Y ganó, además, la Copa de España de 1934.

Lazcano también fue el autor del primer gol del Real Madrid en la historia de la Liga española de fútbol, el 10 de febrero de 1929. Aquel día en el campo de Chamartín el Real Madrid venció al Europa de Barcelona por 5 goles a cero, con 4 goles del propio Lazcano.

Cinco veces internacional

Jaime Lazcano fue internacional en cinco ocasiones. Debutó con un 5-0 contra Portugal el 17 de marzo de 1929 en Sevilla y jugó los tres partidos que disputó España aquel año. El segundo, en Zaragoza en un España-Francia (8-1).

En el tercero formó parte del histórico equipo que derrotó a Inglaterra por 4-3. Fue un miércoles 15 de mayo, festividad de San Isidro, en el Metropolitano madrileño convertido aquel día en la Meca futbolística adonde acudieron numerosos aficionados al foot-ball, destacando los que llegaron desde el País Vasco. “Anoche se veían muchas boinas y se oía mucho hablar vasco en las calles de Madrid” (Heraldo de Madrid).

La victoria de España fue considerada toda una gesta. No era para menos. Era la primera vez que los inventores del fútbol perdían en el continente. Y, al final del partido , los aficionados sacaron a los jugadores españoles a hombros del campo.

Aquel día, Lazcano formó el ala derecha del equipo con su antiguo compañero Severiano Goiburu de Osasuna. Los dos marcaron gol aquel día: Lazcano, el empate a 2 con el que acabó la primera mitad; y Goiburu, el cuarto y definitivo gol de la victoria.

En las páginas del Excelsior, primer diario deportivo de España fundado en Bilbao en 1924, se elogiaba la actuación de los dos jugadores navarros. “Goiburu como siempre fue un interior ideal, no se puede pedir más de lo que hizo el amateur navarro”. “En la delantera vimos a un Lazcano admirable que fue el verdadero animador del equipo. Los dos forman una pareja compenetrada y eficaz”.

Al año siguiente, 1930, Lazcano jugó dos de los cuatro partidos que disputó la selección. Uno el 14 de junio en Praga, con derrota ante Checoslovaquia por 2-0. El otro, el 31 de noviembre en Oporto, de nuevo contra Portugal, con victoria española por 0-1. 0. Se da la curiosa circunstancia de que Lazcano saltó al terreno de juego en el minuto 12 en sustitución de Severiano Goiburu, lesionado. Un Goiburu que ya había dejado Osasuna para fichar por el Barcelona.

Este sería el quinto y último partido con la selección de Jaime Lazcano el internacional que jugó un día con el CD Ilumberri. Una pequeña historia dentro de la larga de cien años que ahora cumple el club lumbierino.