Último tren a Primera

La ilusión y la ambición están muy presentes en los dos equipos. También los motivos para el optimismo: el Oviedo ganó en la ida, pero el Espanyol subirá si vence al final de la prórroga. No hay penaltis y en caso de empate prevalece que el cuadro barcelonés haya quedado más arriba en la fase regular.

El cuadro blanquiazul no renunciará a su estilo habitual y buscará el partido desde el inicio. Es, además, el guion al que obliga el resultado del Tartiere. De todos modos, el cuerpo técnico ha insistido durante la semana en la necesidad de plantear el duelo con cabeza para evitar sorpresas.

El Espanyol siempre ha subido a Primera a la siguiente temporada de descender. Durante los últimos días, palabras como “responsabilidad” e “historia” se han repetido en las distintas declaraciones públicas de los componentes del equipo. Otro año más en Segunda sería convulso para el club blanquiazul.

A falta de conocer la convocatoria definitiva, la disponibilidad de la plantilla es total más allá del lesionado de larga duración Edu Expósito.

El Oviedo acude con el acicate de su triunfo en la ida y dispuesto a regresar a Primera división tras 23 años de ausencia, con la presencia de nuevo de corto de todo un ilustre como Santi Cazorla tras un mes lesionado.

Luis Carrión, técnico del cuadro asturiano recupera también a David Costas y Paulino de la Fuente, aunque tiene las ausencias de Rodri Tarín y Mario Hernández por lesión. Aún así toda la plantilla estará en Barcelona.

En el último partido disputado en el Stage Front Stadium entre ambos equipos, el Espanyol se impuso por 2-1 en un partido marcado por el gran primer tiempo disputado por Santi Cazorla y por el gol anulado a Dani Calvo cuando el marcador todavía era de 1-1. Por tanto, la incertidumbre es máxima.