Un año después, la Real Sociedad se vuelve a jugar el billete para disputar otra final de Copa. En esta ocasión tendrá que buscar el más difícil imposible ya que sus compañeros de viaje en la estación son los tres clubes más poderosos del país que gobiernan con puño de hierro la Liga y aspiran a todo en la Champions. No va a ser fácil, como no podía ser de otra manera, pero el año pasado el equipo realista sufrió una de sus eliminaciones más injustas y crueles que se recuerdan cuando le tocó el supuesto camino sencillo y quién sabe si esta vez, en el más exigente y repleto de espinas, encuentra el sendero que le conduzca de nuevo a Sevilla. Un escenario donde hace solo cuatro temporadas alcanzó la gloria, algo a tener muy en cuenta como carta de presentación ante los abusones que miran por encima del hombro a los terrenales sobre todo cuando huele el metal cerca, como si le sorprendiera que tuviera vela en este entierro.
46% de victorias en Copa
La diferencia Real entre ambos equipos es abismal, como lo determinan los presupuestos y los títulos, pero en la Copa todo es posible. La competición del Ko reduce las distancias entre clubes y mantiene abierta siempre la puerta a la sorpresa. Ahí están los números para comprobarlo. La Real ha ganado el 46% de los encuentros que ha disputado en este torneo. De las cinco últimas eliminatorias ha eliminado a los blancos en tres y las dos que perdió, en una de ellas cayó en los penaltis y en otra no igualó el 4-0 de la ida en el Bernabéu porque un colegiado anuló de forma increíble el que era el 5-1 que hubiese dado paso a la prórroga con Atocha convertida en una verdadera olla a presión del que hubiese resultado muy complicado ya salir vivo en esas circunstancias.
Aunque la última semana ha sido puñetera en forma de problemas físicos en la plantilla, algo lógico y normal con la vorágine de encuentros de máxima exigencia que está afrontando sin respiro cada tres días, lo cierto es que se puede decir que la Real de Imanol llega mejor que nunca al momento clave de la temporada en el que se decide su futuro en las dos copas. En la Liga todavía tendrá tiempo para enmendar algún tropiezo o error inesperado, porque este ritmo no hay un club normal que lo pueda soportar, por mucho dinero y trabajo que invierta en su propia cantera.
Grandes noticias
Imanol ha recibido dos grandes noticias en las últimas horas al confirmase las recuperaciones totales retificadas por él mismo, de Aguerd y Sucic. Sus dos refuerzos indiscutibles para esta temporada. Los que no se han recuperado han sido Pacheco, que tiene para varias semanas aún, y Zakharyan, que se ha vuelto a romper. Lo normal con todos estos factores es que juegue Remiro en portería, con Aramburu, Aritz, Zubeldia y Aihen atrás. Zubimendi, Brais y Sucic en la medular, y arriba, el tridente de cabecera del técnico formado por Kubo, Oyarzabal y Barrenetxea.
Enfrente un Madrid con bajas importantes, pero con suplentes que serían titulares en 18 equipos de Primera. Valverde es seria duda al haber arriesgado contra el City, lo que se sumaría a las bajas de Carvajal. Lunin estará bajo palos, con Lucas Vázquez y Fran García en las bandas y arriba pueden descansar Mbappé por una operación de una muela, y Rodrygo. Vinicius no se lo perderá...