El Tudelano, al igual que el resto de equipos de Segunda RFEF y navarros de categorías inferiores, ya ha echado a rodar preparando una nueva campaña, con un importante lavado de cara y apostando por mucho jugador navarro en sus filas. De hecho, la idea del dueño, Ramón Lázaro, era la de tener al menos un 50% de la plantilla con gente de la tierra, y la llegada de los Ekiza, Dufur, Endika y compañía así lo pone de manifiesto.

Ahora, y bajo la dirección de Héctor Urquía desde el banquillo, técnico que llega desde el Anguiano, equipo al que ascendió a Segunda RFEF y con el que peleó por la permanencia hasta el final del curso pasado, la meta blanquilla es la misma: cerrar la permanencia cuanto antes para optar a alcanzar el mejor puesto liguero posible, en un grupo con grandes rocosos como Amorebieta, Sestao River o Real Unión.

Así, la renovada plantilla –solamente siguen en el equipo Íñigo Alayeto, Lluc Carreras y Asier Pérez con respecto a los que conformaron el equipo el pasado curso– ya ha disputado sus primeros amistosos para comenzar a tener sensaciones. Lo hizo en un cuadrangular con el Teruel, el Arenas y el Ebro en el Trofeo Urzante, que se lo llevó precisamente el último equipo mencionado. No obstante, el cuadro ribero dejó una imagen que da que pensar: la pillería, ¿casualidad o entrenamiento?

Los jugadores del Ebro posan con el Trofeo Urzante. CD Tudelano

En el duelo que enfrentaba al conjunto blanquillo con el Teruel, que cayó del lado de los de Urquía por 1-0, el único tanto del encuentro, obra de Albín, llegó tras un saque de banda rápido de Ander Dufur, que se veía las caras contra su exequipo, que ponía en ventaja la acción ofensiva local que terminaba con ese tanto de Albín que dio el triunfo a los del Ciudad de Tudela.

Osasuna lo hizo ante la Real Sociedad

Este pasado curso, Osasuna dejó una acción similar en el duelo ante la Real Sociedad. En un saque de banda en campo propio y sin aparente acción de peligro, Areso mandaba un balón a la espalda de la zaga txuri urdin que Rubén García recogía en línea de fondo y mandaba al segundo palo donde Budimir, libre de marca, establecía el momentáneo 2-0 en un duelo que se decantaría a la postre por el lado rojillo.

Preguntado por ello en rueda de prensa, Vicente Moreno descartara que se tratase de una jugada trabajada en la pizarra. “Ha salido el talento y la calidad de los jugadores”, describía el técnico, poniendo en valor la concentración de sus jugadores para llevar a cabo la acción.