Jules Koundé logró a falta del cuatro minutos para que concluyera la prórroga el 3-2 para el Barcelona que le da al equipo azulgrana su trigésimo segundo título de campeón de la Copa del Rey, tras una final ante el Real Madrid digna de un clásico de altura.

Los barcelonistas fueron muy superiores en la primera mitad, en la que se adelantaron con un gol de Pedri, pero en la segunda reaccionó el Real Madrid con la salida de Mbappé y le dio la vuelta al marcador para convertirse en un partido abierto y disputado que no se resolvió hasta las postrimerías de la prórroga.

La presencia de Dani Olmo como mediapunta fue la principal novedad en el once del alemán Hansi Flick. Ferran Torres sustituyó a Lewandowski, mientras que en el lateral izquierdo fue Gerard Martín el cogió el puesto de Balde. Con ellos se encontraron a un Real Madrid mermado, en el que el italiano Carlo Ancelotti no tenía, además de los conocidos Dani Carvajal y Éder Militao, a Eduardo Camavinga.

Pero, con Kylian Mbappé en el banquillo aún con problemas en un tobillo, Ferland Mendy, que regresaba tras lesión para tapar la incursiones de Lamine Yamal, solo aguantó diez minutos y se fue otra vez con una dolencia muscular que obligó a salir a Fran García.

Barcelona 3

Real Madrid 2

BARCELONA Szczesny; Koundé, Cubarsí, Iñigo Martínez, Gerard Martín (Araújo, m.85), Frenkie de Jong (Gabi, m.85), Pedri (Eric García, m.98); Lamine Yamal, Dani Olmo (Fermín, m.65), Raphinha; y Ferran Torres (Pau Víctor, m.115).

REAL MADRID Courtois; Lucas Vázquez (Modric, m.55), Asencio, Rüdiger (Endricka, m.111), Mendy (Fran García, m.11); Tchouaméni, Fede Valverde, Ceballos (Arda Güler, m.55), Bellingham; Rodrygo (Mbappé, m.46) y Vinícius (Brahim Díaz, m.89).

Goles 1-0, M.28: Pedri. 1-1, M.69: Mbappé. 1-2, M.77: Tchouaméni. 2-2, M.84: Ferran Torres. 3-2, M.116: Koundé.

Árbitro Ricardo de Burgos Bengoechea (Comité Vasco). Expulsó con roja a Lucas Vázquez (m.123) y Rudiger (m.123) por protestar. Además, amonestó por los madridistas a Ancelotti (m.25), Tchouaméni (m.30), Modric (m.91) y Bellingham (m.107) y a los barcelonistas Gerard Martín (m.36), De Jong (m.68), Fermín (m.94), Raphinha (m.100+).

Estadio La Cartuja, unos setenta mil espectadores.

Atosigante

Antes y después de la lesión, la presión del Barça fue atosigante, con lo que al Real Madrid solo le quedó recular a la espera que coger en alguna al rival y sorprenderle con la velocidad de Vinícius o Rodrygo, pero fue Courtois el que estuvo muy atento a un cabezazo de Koundé.

El belga, pocos minutos después, al borde de la media hora, no pudo con un zapatazo de Pedri desde lejos, y el balón se le coló cerca de la escuadra.

En el minuto 35 se le anuló un tanto al inglés por fuera de juego, después Dani Olmo intentó un gol olímpico pero el balón lo repelió finalmente el palo.

Mbappé fue el recurso del Madrid para la segunda parte y el sacrificado Rodrygo, pero fue Vinícius el que tuvo pronto la mejor de su equipo hasta el momento, en un doble remate en el que el meta polaco estuvo muy atento en ambos intentos.

Szczesny se volvió entonces en el protagonista al tapar al delantero francés un remate y seguidamente estar muy bien de reflejos ante Vinícius en los que, ahora sí, el partido era de control madridista ante un rival que pasó por malos momentos.

Con Modric y Arda Gúler también en el campo, el Real Madrid fue otro, intenso, con despliegue físico y con una presión que le quitó al Barcelona, lo que hizo reaccionar a Flick con la entrada de Fermín López por Dani Olmo para recuperar algo de aire en el centro del campo.

Este chut de Koundé acabó en el gol que sentenció la final. Julio Muñoz

Reacción blanca

Pero para entonces los de Ancelotti ya estaban desatados y el revulsivo Mbappé equilibró el marcador al lanzar desde el borde de área una falta que Frenkie De Jong le hizo y que los madridistas reclamaron como merecedora de tarjeta roja al cortar una acción clara de peligro.

No tardó mucho, a los 77 minutos de darle la vuelta al marcador con el remate de cabeza de Tchouaméni a la salida de un córner, pero la alegría blanca duró siete minutos, hasta que Ferran Torres cogió adelantado a Courtais y lo batió.

Hubo tiempo para mas sobresaltos, porque en el sexto minuto de prolongación se pitó un penalti de Asencio a Raphinha, aunque Ricardo de Burgos Bengoechea fue al VAR, rectificó su decisión y le sacó además una amarilla al brasileño, con lo que el partido se fue a la prórroga.

El Madrid pareció algo más entero en este tiempo añadido, incluso Pedri se fue fundido y lo sustituyó Eric García para equilibrar unas fuerzas que estaban al límite en los dos bandos, lo que se derivó cuidarse de no cometer errores que pudieran ser definitivos, aunque Koundé fue el más listo y a falta de cuatro minutos para el final logró el 3-2 definitivo.