Desde que comenzaran una nueva vida en Estados Unidos, Meghan Markle y el príncipe Harry han concedido diversas entrevistas en las que nunca dejan en muy buen lugar a la Familia Real británica, la última la ha concedido Meghan a ‘The Cut’ coincidiendo con el 25º aniversario de la muerte de Lady Di.
En la conversación con el citado medio, la ex actriz comentaba que de haber seguido en la realeza no habría podido recoger a su hijo al colegio debido a la cantidad de fotógrafos que estarían esperándola a las puertas del centro, una afirmación que los corresponsales británicos de Casa Real se han encargado de desmontar.
LA GRAN MENTIRA DE MEGHAN MARKLE
Al comienzo de la charla aseguró que de seguir en Reino Unido “sería un pase de foto real con un corralito de 40 personas haciendo fotos”, una afirmación que se cae por tierra al aplicar el protocolo establecido al respecto.
Chris Ship, el editor real de ITV, ha explicado que solo se permite grabar en el primer día de clase de los niños y solo puede haber dos cámaras para captar la entrada de los pequeños. Los dos fotógrafos deben tener un permiso especial de la escuela y son los encargados de compartir las imágenes con todos los medios y publicaciones, exactamente como lo que ocurre en el primer día de clase de los hijos de los duques de Cambridge, George y Charlotte.
Ship, también insiste en que si alguna persona captara al niño “ninguna publicación de Reino Unido compraría las imágenes”.
La crítica del veterano corresponsal ha llamado la atención, ya que es la primera vez que desmiente de forma categórica a la duquesa de Sussex.
EL GRAN FEO AL PRÍNCIPE CARLOS
En la entrevista, Meghan también asegura que “Harry siente que ha perdido a su padre”, aunque luego intentaron matizar sus palabras diciendo que se refería a su propio padre, Thomas Markle, aunque la idea no convenció.
Ahora, ambos han viajado al Reino Unido y teniendo en cuenta que el príncipe Harry está investigando las últimas horas de su madre para su libro autobiográfico, el príncipe Carlos ha querido invitar al matrimonio para estar juntos, comer y conversar durante su estancia en Inglaterra, sin embargo, Meghan y Harry han rechazado su invitación para alojarse en el castillo de Balmoral, la residencia de vacaciones de la Familia Real en Escocia, donde también se encuentra la reina Isabel II.
En la invitación se insistía en que siempre serían bienvenidos a la casa durante sus visitas al país, y según el ‘Daily Mail’, el único objetivo del heredero era apaciguar las polémicas y estrechar lazos con su hijo menor.
Sin embargo, el resultado no era el que el príncipe de Gales esperaba, y los medios británicos consideran que el feo que los Sussex le han hecho al príncipe Carlos confirman la mala relación entre ambos y fuentes cercanas al heredero destacan que no da crédito a la imagen que su hijo quiere dar de él y se encuentra “totalmente desconcertado” por el comportamiento de ambos.
