Tamara Falcó e Iñigo Onieva han vivido uno de los veranos más especiales e intensos de su vida y tras su boda, su luna de miel y un sinfín de planes estivales, el matrimonio ha vuelto a la rutina y ha comenzado una nueva etapa en Madrid, sin embargo, no todo ha salido como ellos esperaban y han tenido que instalarse en casa de Isabel Preysler de forma temporal

¿POR QUÉ IÑIGO Y TAMARA SE HAN INSTALADO EN CASA DE ISABEL PREYSLER?

Los marqueses de Griñón tienen entre sus planes mudarse a un ático de lujo en el barrio madrileño de Puerta de Hierro, en el que tendrán vecinos tan conocidos como Christian de Hannover y Sassa de Osma o Paloma Segrelles, entre otros. 

Sin embargo, por el momento se han trasladado a la mansión de Isabel Preysler situada en el mismo vecindario, debido a que las obras que están realizando en el ático aún no han terminado, y aunque podrían continuar en la casa que compartían antes de su boda hasta que les entreguen su nueva vivienda, desde el domicilio de la madre de Tamara, el matrimonio puede supervisar las citadas obras de una forma más cómoda al estar situada en el mismo barrio. 

"Nos hemos instalado en casa de mi madre porque tenemos que supervisar la obra de la casa nueva, que ya está casi acabada", ha explicado la propia Tamara. 

El ático al que se mudarán está diseñado por los arquitectos Joaquín Torres y Rafael Llamazares, de A-Cero y está valorado en 1,5 millones

Cuenta con dos terrazas, una de ellas con piscina, cocina abierta conectada a un amplio salón, además de cuatro habitaciones y tres baños