Los pececillos de plata o Lepisma saccharina es un pequeño insecto de entre 10 y 15 milímetros de longitud con el que, quien más quien menos, se ha topado en el sótano, baño o cocina, incluso en armarios, grietas y muebles. Un insecto que se caracteriza por su forma alargada, sus dos grandes antenas y color plateado, lo que le da nombre.

Tal y como así lo apuntan los expertos, los pececillos de plata viven de 2 a 8 años, se alimentan de restos orgánicos como migas de pan, piel muerta y papel y se reproducen con gran rapidez y facilidad. Según especifican, la hembra de lepisma puede llegar a poner 100 huevos, que serán colocados en lugares de difícil acceso, como pueden ser las grietas.

Pese a que su aparición no es peligrosa y son unos insectos inofensivos, el pececillo de plata no es un insecto que sea agradable como compañero en la casa, sobre todo si se convierte en una plaga. De ahí que las personas busquen eliminarlos por completo de sus hogares.

El truco definitivo para mantener a los pececillos de plata lejos de casa

Además de combatir la humedad, de limpiar regularmente y ventilar la casa a diario, hay una serie de métodos con los que hacerle frente a los pececillos de plata.

Ácido bórico

El ácido bórico es un compuesto químico que, a menudo, se presenta en forma de polvo blanco y cristalino que se disuelve en agua. Un solución eficaz, junto con el alcohol etílico, para controlar los pececillos de plata que se puede comprar en droguerías, farmacias e incluso algunos supermercados.

Para hacer frente a los pececillos de plata, solo hay que esparcir un poco de este producto en las esquinas del suelo del baño o en los rincones en los que aparezcan estos insectos. Para hacerlo, los expertos recomiendan tomar precauciones y hacerlo con mascarilla y guantes, para evitar la aparición de posibles irritaciones en la piel. En caso de tener mascotas, hay que evitar que estar se acercan a estas zonas. Una opción económica y duradera para eliminar los pececillos de plata que incluye alta efectividad.

También se puede optar por mezclar en un recipiente la misma cantidad de ácido bórico y azúcar o harina y colocarlo en áreas infestadas como armarios y sótanos. Alternativamente, una solución líquida se puede preparar disolviendo 2-3 cucharadas de ácido bórico en un litro de agua caliente y aplicándola con un spray en grietas y hendiduras.

Después de unas semanas, se deben limpiar los residuos y, si es necesario, reemplazar los cebos.