Pamplona. ¿Qué se siente a un paso de la Superliga 2?

Es una pasada. Planteamos el año con bastante prudencia, porque pensamos que la Liga FEV iba a ser el campamento base donde íbamos a dejar de ascender unos años, porque daba vértigo después de tres ascensos, y porque no pudimos aumentar el presupuesto. Nuestro objetivo era mantenernos, pero el equipo ha dado muchísimo y la categoría ha bajado su nivel porque la crisis económica ha golpeado a los clubes. Casi nos hemos paseado y estamos a punto del cuarto ascenso consecutivo.

¿Se van cumpliendo los objetivos que se planteó en 2007 cuando creó el equipo?

Sí, y casi de forma exacta. Lo que estaba planeado era crear en el CD Iruña un deporte de equipo que fuera líder en Navarra. Elegimos el voleibol, segundo deporte de equipo español con más licencias femeninas después del baloncesto, porque en Navarra no había nada. Era una oportunidad. La idea era crear un equipo que fuera subiendo y cuyo ejemplo permitiera desarrollar la cantera. Las cosas han ido más rapido de lo esperado, porque esperábamos tardar más años en llegar a la elite, y porque ya tenemos 60 niñas en los equipos de infantiles, cadetes y juveniles, y acuerdos de Escuelas con Miravalles, Basoko y el Catalina de Foix de Zizur. Eso supone que trabajamos con unas 100 niñas, que son una garantía para el futuro.

¿El objetivo es ir navarrizando el primer equipo?

Al no haber navarras con calidad ha habido que recurrir al mercado nacional y extranjero, pero la idea es que esa distancia se recorte y que suban navarras al primer equipo. Ahora hay dos chicas y esperamos que en el futuro haya más. Hace cuatro años no había voleibol femenino en Navarra, y ahora Elena Fernández está jugando minutos sin desentonar. Con la formación que están dando las jugadoras del primer equipo, en tres o cinco años habrá jugadoras navarras de primer nivel.

¿Le salen las cuentas a un equipo con tantas jugadoras foráneas?

De momento, sí. La política del Iruña ha sido siempre gastar sólo lo que ingresa y no tener deudas. El equipo tiene una docena de patrocinadores que han apostado por este proyecto porque es único y diferente, y además ganador, ya que sólo hemos perdido un partido en cuatro años. A los patrocinadores les gusta que desarrollemos el deporte base y que parte del presupuesto sea para proyectos solidarios -antes Caritas, ahora la Asociación Navarra de Cáncer de mama Saray-. Y, al ser tantos patrocinadores, se reduce el riesgo ante la marcha de alguno. De momento vamos controlando bien el presupuesto, aunque siempre vamos con precaución, porque ahí está la crisis.

¿Qué opina de Ángeles Pérez, entrenadora del primer equipo?

Es una gran persona y una gran profesional, que hace un trabajo diario increíble. Ha motivado y hecho piña, y ahí están los resultados.

La asignatura pendiente del GH Ecay es la captación de público.

Sí. Ahí está claro que remamos contracorriente, porque casi todos los deportes de equipo navarros tienen representante en la elite, y eso hace que la gente tenga ocupado el fin de semana. Además, no hay muchos espectadores, porque a muchos navarros les gusta más practicar deporte que verlo. Y hay una razón añadida: la apabullante diferencia que hemos tenido este año con los rivales, lo que ha hecho que se perdiera cierto interés. En la fase de ascenso de la pasada temporada había 400 personas en Esquíroz, y eso ha bajado este año. La idea es que mañana (por hoy) vuelva esa energía verde, que vaya mucha gente, y a ver si a partir de la próxima temporada, ya en Superliga 2, tenemos una amplia afición.

Quizás el polideportivo de la UN está demasiado apartado para captar público.

El voleibol sólo exige una red y unos anclajes, pero pocos polideportivos tienen esos anclajes. El polideportivo de la UN tiene cierta dificultad de acceso, pero está en Pamplona. Además, tenemos una relación excelente con la UN: a cambio del uso del pabellón, hemos creado una Escuela en la que hay 20 ó 25 personas atendidas por nuestras jugadoras. Queremos seguir en ese pabellón porque es grande y es cómodo para el equipo y para el público.