"Cuando me llamaron para contármelo se me puso la piel de gallina"

PAMPLONA. Mateo Garralda, actual entrenador del Quabit Guadalajara, ha recibido la Medalla de Oro al Mérito Deportivo. Un reconocimiento más en su trayectoria profesional que ha llenado de ilusión al burladés. "Estoy tremendamente agradecido y encantado de que hayan pensado en mí; cuando me llamaron por teléfono para contármelo se me puso la piel de gallina. Me hace mucha ilusión que se acordaran de mí, seis meses después de haber dejado mi carrera como jugador, y además porque es un premio de mi tierra", confesó el exjugador, que afirmó que no se esperaba el galardón. "Me pilló de sorpresa porque yo ya no soy jugador; estoy entrenando y mi vida es muy dinámica y ha cambiado mucho: vivo en Guadalajara y estoy totalmente dedicado a pensar en el equipo, por eso no me esperaba la llamada".

El premio, que recogerá el próximo miércoles, es solo uno más en su ex-tenso palmarés tras lograr la medalla de oro en el Mundial de Túnez (2005) y colgarse tres platas en Campeonatos de Europa (1996, 1998 y 2006) y tres bronces más, en el Europeo de 2000 y en los Juegos Olímpicos de Atlanta (1996) y Sydney (2000).

"Como jugador creo que ya he ganado todo y esto ya se me ha acabado, pero ahora tengo un nuevo reto, que es hacerlo lo mejor posible en el Quabit, marcando mi estilo para que el equipo pueda lograr buenos resultados", desgranó el deportista, que tras debutar como entrenador en la máxima categoría, está logrando buenos resultados con el Quabit, que se sitúa séptimo en la tabla.

Garralda tuvo también unas palabras para el extinguido San Antonio, en cuyas filas jugó entre 1999 y 2006 y con el que ganó varios títulos europeos. "Es una pena lo que ha pasado; las cosas están tremendamente difíciles, pero aquí está clarísimo que ha habido una mala gestión. No se puede luchar contra el pasado, pero los gestores del San Antonio deberían mirar responsabilidades y asumir las culpas; ojalá podamos volver a tener un equipo tan bueno como el San Antonio", deseó.