René Higuita pone de moda ‘El escorpión’

Pamplona - 7 de septiembre de 1995. Estadio de Wembley. Partido amistoso entre las selecciones de Inglaterra y Colombia. Minuto 22. Centro del británico Jamie Redknapp. El balón va en dirección a la portería de Colombia. El arquero René Higuita salta hacia adelante y, cuando la pelota está a punto de alojarse en su marco, se suspende en el aire y la despeja con los talones. Las 80.000 almas que pueblan el graderío enmudecen. Suspiran con la locura del guardameta colombiano. Una excentricidad que unos años antes, en 1934, ya había patentado el jugador paraguayo del Atlético Independiente Arsenio Erico al anotar un gol a Boca Juniors por medio de esta maniobra. Sin embargo, Higuita la hizo famosa por atreverse con ella en tan suntuoso escenario. Y es que el choque no pasó a la historia por el resultado (empate sin goles) ni por el juego desplegado por unos y otros, sino por la acrobática acción de Higuita. El colombiano recordaba recientemente su mítica jugada, para la que reconocía haber entrenado durante cinco años. El portero asumió el riesgo y le salió bien. “Estamos expuestos al ridículo. Soy feliz por recordar cómo fue y pudo ser de haber fallado”, admitió en una entrevista que concedió a Radio Marca. Aunque Higuita repitió la maniobra en otros duelos y fue autor de 41 goles pese a su condición de portero, El escorpión de Wembley fue, es y será su seña identidad. - D.N.