Madrid - La selección española de baloncesto debuta este sábado en el Mundial de China (14.30 horas/Cuatro) con un compromiso bastante asequible frente a Túnez, vigente campeona de África y que, a priori, no dispone de suficientes argumentos para inquietar al equipo entrenado por Sergio Scariolo.

Dos años después del bronce conquistado en el Eurobasket de Eslovenia, y tras un año en ‘barbecho’ debido al reajuste del calendario internacional, España vuelve a una gran competición y lo hace ya sin el retirado Juan Carlos Navarro y su amigo Pau Gasol, que se lo perderá por lesión.

Sin los dos grandes referentes de la época más exitosa de su historia, el equipo español vuelve a la vista al flamante campeón de la NBA Marc Gasol, llamado a ser el líder dentro y fuera de la pista. Tras unas molestias estomacales que le impidieron disputar los dos últimos amistosos, el pívot ya está a punto para el debut.

También está recuperado el capitán Rudy Fernández, que no jugó ante Rusia por precaución y debe ser otro de los referentes, al igual que Ricky Rubio. El base catalán ha completado una sensacional gira de preparación, añadiendo un buen caudal anotador a sus siempre destacadas prestaciones defensivas, y ahora debe refrendar ese paso adelante en competición oficial.

España, que no supera los cuartos de final de un Mundial desde 2006, cuando se colgó el oro, ha sumado cinco victorias y dos derrotas durante el mes de agosto. Los tropiezos llegaron ante Estados Unidos, aunque plantando cara ante la principal favorita (90-81), y en el estrepitoso último amistoso ante Rusia (55-74).

Dos viejos conocidos Esta derrota deber servir de aviso para Scariolo y sus pupilos, que son claros aspirantes al primer puesto en este Grupo C, ya que Puerto Rico e Irán tampoco deberían inquietar en exceso, salvo sorpresa mayúscula.

Antes les espera la Túnez del pívot Salah Mejri, exjugador del Real Madrid y actualmente en Dallas Mavericks, y del escolta de origen estadounidense Michael Roll, que también conoce el baloncesto español tras jugar en Zaragoza y Vitoria. La selección dirigida por el portugués Mario Palma llega como campeona de África tras batir hace dos años a Nigeria en la final continental.

Durante su preparación, el combinado tunecino ha logrado apuntarse victorias sobre otros contendientes que estarán en el Mundial como Japón o Polonia, pero también ha encajado contundentes derrotas ante Francia (94-56) o Alemania (89-70). Como 51ª del ranking FIBA, llega a China sin ninguna presión en su segunda participación mundialista, primero ante un rival que le ha vencido en sus seis duelos precedentes.

“Vamos poco a poco” Sergio Scariolo explicó que no llegan “perfectos” al primer partido pero que no le preocupa porque no tienen intención de “echar toda la leña al fuego desde el día uno”, pero sí de estar al máximo en “nivel de esfuerzo, compromiso, concentración y deseo de ganar”. “Hay que estar a tope de forma cuando realmente hay que estarlo. Este año tampoco llegamos perfectos y tampoco estar al cien por cien aún”. - E.P.