La noche del sábado fue una celebración del boxeo en su máxima expresión, con un Frontón Labrit abarrotado por 1.200 espectadores que vibraron con cada golpe, cada esquiva y cada victoria. La velada fue una mezcla perfecta de talento emergente y experiencia consolidada, culminando en combates profesionales que tuvieron al público al borde de sus asientos.
El momento cumbre de la noche llegó con los combates profesionales de Germán Fernández y Raúl Escudero. El debut profesional de Raúl Escudero fue de película. Enfrentándose a Adán Martínez, Escudero demostró que tiene lo necesario para brillar en el ámbito profesional. Con un estilo dominante, llevó el peso del combate desde el comienzo, controlando el ritmo y mostrando una técnica sólida. La decisión a los puntos a favor de Escudero fue un reflejo de su trabajo constante y de su capacidad para imponer su juego. Su debut fue más que satisfactorio, marcando lo que muchos esperan que sea el inicio de una carrera prometedora en el boxeo.
La velada en el Frontón Labrit no solo ofreció espectáculo y emoción, sino también la oportunidad de ver cómo el boxeo local puede competir y sorprender a nivel profesional. Cada combate, cada golpe y cada victoria contribuyó a una atmósfera de entusiasmo y expectación.
“Sigo como en un sueño, el combate fue muy bien y el ambiente era espectacular”, valoraba Escudero. El joven boxeador agradeció “el trabajo de mi entrenador y todo mi equipo”, además de “la asistencia a todo el público de Iruña”.
“Al principio estaba muy nervioso. Tenía en el público a toda mi gente, a mi familia y a mis amigos, y siendo mi primer combate pues estaba bastante nervioso. Al principio no boxeé como yo sé, no estaba tan relajado como me hubiese gustado. De todos modos, con el paso de los minutos ya me vi mejor y estuve más tranquilo”, admitía Escudero.
Respecto a su rival, Adán Martínez, Escudero lo calificaba como “un guerrero” que “supo aguantar muy bien los golpes”. “Le golpeé varias veces y parecía que no lo sentía. Además, luego pude hablar con él después y me pareció una gran persona”.