Maverick Viñales y el equipo Yamaha han llegado a un acuerdo para rescindir su contrato de dos años al final de esta temporada, a petición del piloto español, tras un vínculo de cinco temporadas.

"Ambas partes se han comprometido a hacer el máximo esfuerzo en lo que resta de temporada de MotoGP y a terminar su relación de una manera óptima", ha indicado la escudería en un comunicado.

El piloto había manifestado su malestar tras ser último en la carrera de Alemania, mientras que este fin de semana en el GP de Países Bajos terminó segundo.

"Estoy desesperado, hay muchas carreras en las que sé que tengo potencial y no lo puedo demostrar", manifestó tras su última carrera. Es sexto en la general de la temporada, que encabeza otra Yamaha, la del francés Fabio Quartaro.

En el comunicado de despedida, Viñales asegura que el acuerdo ha sido muy importante para él durante los últimos cinco años "y ha sido una decisión difícil separarse".

"En estas temporadas juntos hemos experimentado tanto grandes logros como momentos difíciles. Sin embargo, el sentimiento subyacente es de respeto y aprecio mutuos. Estoy plenamente comprometido y me esforzaré por conseguir los mejores resultados en lo que queda de temporada", añade.

Por su parte, el director de la escudería, Lin Jarvis, ha indicado que esta separación le produce "tristeza" y habla de "importantes discusiones" tras lo sucedido en Assen.

"A lo largo de estos años hemos alcanzado muchos puntos altos, pero también hemos tenido que gestionar muchos puntos bajos. Después del GP de Alemania, que fue el fin de semana más difícil de nuestra asociación, tuvimos importantes discusiones en Assen y llegamos a la conclusión de que beneficiaría al interés de ambas partes tomar caminos separados en el futuro. Yamaha se esforzará al máximo, como siempre hemos hecho, para dar todo el apoyo a Maverick y terminar esta temporada de la mejor manera posible", sostiene.