La segunda revolución popular en diez años
Al movimiento naranja que trajo la democracia en 2004 se le suma ahora el azul, a favor de la Unión Europea
pamplona. La denominada revolución naranja fue un movimiento de protesta que tuvo lugar en Ucrania tras las elecciones que tuvieron lugar en el país el pasado año 2004. En noviembre de ese mismo año se celebraron unos comicios que fueron ganados por el candidato oficialista Viktor Yanukovic, una victoria rechazada por la oposición, que además acusó al ganador de haber cometido fraude electoral en una apretada segunda vuelta. En la primera vuelta, celebrada en octubre, el candidato oficialista vencía con una ajustada ventaja de 0,55%. En la segunda vuelta del 21 de noviembre, se realizaría un masivo fraude electoral que puso en pie a toda la oposición.
Tras estas graves acusaciones, el 22 de noviembre se generó un multitudinario movimiento de protesta que fue ganando adeptos a medida que avanzaban los días. A las manifestaciones se sumaron las huelgas masivas y un rosario de multitudinarios actos políticos encabezados por el proeuropeo Viktor Yushchenko, con quien se alineó Julia Timoshencko. Tal día como hoy, el 3 de diciembre de 2004, el Tribunal Supremo falló reconociendo el fraude y ordenando la repetición de la elección 23 días más tarde. De todas formas, Yushchenko puso como condición para validar esta nueva elección que el Parlamento fuera quien asumiese los poderes del presidente para evitar que se produzca un nuevo fraude. El Parlamento lo aceptó y comenzó la campaña para esta crucial cita con las urnas. Y como era de esperar, la marea naranja llevó a Yushchenko a la presidencia. Tras tomar posesión del cargo ya en 2005 nombraría a Timoshenko como primera ministra.
envenenamiento El destino, tanto de Yushchenko como de Timoshenko, iba ser menos dulce de lo que apuntaba aquel enero del pasado año 2005. El presidente naranja sufriría entonces un extraño envenenamiento. Un mes antes de que tuvieran lugar las elecciones de octubre, Yushchenko cenaba con miembros de los pro-rusos servicios secretos ucranianos, cometiendo el fallo de acudir a la cita sin su escolta personal. Y según todos los indicios, fue envenenado con dioxina, una sustancia que le causó a la larga graves desfiguraciones en el rostro. Por su parte, Julia Timoshenko permanece encarcelada tras un proceso judicial sin garantías, fuertemente contestado tanto dentro como fuera del país.
Más en Mundo
-
Venezuela quita el pasaporte a Leopoldo López y abre un proceso judicial para retirarle la nacionalidad
-
Más de 60 países firman en Vietnam la Convención de la ONU contra el Cibercrimen
-
Los colonos israelíes prosiguen con sus ataques en Cisjordania con la quema de varios vehículos en Ramala
-
El polémico nuevo salón de baile de la Casa Blanca llevará el nombre de Donald Trump