El primer ministro británico, Rishi Sunak, dijo este viernes que no se aplicará hasta 2025 el incremento previsto del salario mínimo anual que han de percibir los trabajadores extranjeros para obtener un visado familiar que permita a sus parientes afincarse en el Reino Unido.

El pasado 4 de diciembre, el Gobierno conservador anunció cambios en el sistema de inmigración que, entre otras cosas, aumentaban de las actuales 18.600 libras al año a 38.700 libras (de 21.500 a 45.000 euros, aproximadamente) el sueldo bruto que ha de ganar un trabajador foráneo para permitir la entrada de sus familiares, a partir de abril de 2024.

Tras las críticas de todos los partidos que suscitó esta medida, Sunak confirmó hoy que la subida se aplicará de forma progresiva, de modo que el incremento total no tendrá lugar hasta la primavera de 2025.

Previamente, a partir del próximo abril, se aplicará un aumento parcial, hasta las 29.000 libras anuales (unos 33.500 euros).

Sunak subrayó durante un acto en el norte de Inglaterra que "el principio (del cambio) es absolutamente el correcto: si la gente quiere traer a dependientes a este país debe poder mantenerlos".

Otros cambios del sistema migratorio anunciados a principios de mes incluyen elevar de 26.200 a 38.700 libras (de 30.230 a 45.000 euros) anuales el salario mínimo requerido -que debe garantizar la empresa contratante patrocinadora- para conceder un visado de trabajo a extranjeros.

CRÍTICAS

"Estamos haciendo exactamente lo que dijimos que haríamos, solo que en dos etapas", afirmó el primer ministro, entre acusaciones de la derecha de su partido de que ha capitulado en una promesa electoral clave.

La portavoz laborista de inmigración, Yvette Cooper, declaró por su parte que "esto es una prueba más del caos del Gobierno conservador en la inmigración y la economía".