En medio de la devastación que asuela la Franja de Gaza, la muerte de Yaqeen Hammad, una niña de 11 años conocida por su labor como influencer, ha conmocionado a la comunidad internacional. Yaqeen utilizaba las redes sociales para compartir consejos de supervivencia y transmitir esperanza a otros niños que, como ella, vivían bajo el constante peligro de los bombardeos israelíes.
El pasado viernes por la noche, un ataque aéreo israelí alcanzó la vivienda de su familia en el área de Al-Baraka, en Deir al-Bala, en el centro de Gaza. Su cuerpo fue recuperado entre los escombros, marcando el fin de una corta vida dedicada a ayudar a los demás en medio del conflicto.
Yaqeen no solo compartía su día a día en redes sociales; junto a su hermano mayor, Mohamed, participaba activamente en la distribución de alimentos, juguetes y ropa a familias desplazadas a través del colectivo humanitario Ouena. Su sonrisa y mensajes positivos resonaban en su cuenta con más de 108,000 seguidores, convirtiéndola en un símbolo de resiliencia y esperanza para muchos.
La noticia de su fallecimiento ha generado una ola de condolencias y homenajes en línea. Activistas, periodistas y seguidores han expresado su dolor y admiración por una niña que, a pesar de las circunstancias, se esforzaba por llevar alegría a los demás. "Su cuerpo puede haberse ido, pero su impacto permanece como un faro de humanidad", comenta el fotoperiodista Mahmoud Bassam en declaraciones recogidas por el diario The Guardian.
Más de 16.500 niños y niñas muertos
La muerte de Yaqeen se suma a la alarmante cifra de víctimas infantiles en Gaza. Según el Ministerio de Salud de Gaza, desde el inicio de la ofensiva israelí en 2023, más de 16,500 niños han perdido la vida. Organizaciones internacionales han calificado la situación como una catástrofe humanitaria, con llamados urgentes a un alto el fuego y al acceso sin restricciones de ayuda humanitaria.
La historia de Yaqeen Hammad destaca no solo por la tragedia de su pérdida, sino también por su valentía y compromiso en medio de la adversidad. Su legado perdurará como testimonio del espíritu indomable de los niños de Gaza.