Vecinos de varias VPO de Ardoi denuncian el deterioro de sus vallados

ardoi. Varios vecinos de las VPO situadas en la calle Zubibidea número 7 en Ardoi, promovidas por Vinsa y construidas por Valle Ultzama, denuncian desperfectos en sus viviendas. "Los vallados de las parcelas están totalmente destrozados. Desde un inicio eran muy endebles y el brezo, poco tupido. Les dijimos a Vinsa que era necesario cambiarlo, pero no hicieron caso", señala una de las afectadas que prefiere mantenerse en el anonimato. "En mi caso, en su momento vinieron a arreglar la valla, pero lo hicieron mal y volvimos a tener problemas. Llamé a la empresa para intentar hablar con el arquitecto y me dieron largas. Cuando quise hablar con la sección de reclamaciones directamente me colgaron", señala indignada la vecina.

Ese no fue el final de los problemas. "Con la llegada del ciclón la semana pasada, los vallados directamente fueron arrancados de cuajo del cemento en el que estaban incrustados. Y eso que la vecina de enfrente, que tiene el mismo problema, avisó a Vinsa con tiempo para que lo arreglaran antes de que llegara la ventolera", aclara la vecina. "De hecho, la policía estuvo aquí ese día controlando que nadie corriera peligro porque las vallas salían volando. Los vecinos no pudieron salir a la calle", recalca.

Los perjudicados señalan que en repetidas ocasiones intentaron hablar con los responsables de la empresa, pero estos no hicieron caso. "Cuando llamé después del temporal, Vinsa dijo directamente que no iba a hacerse cargo. De momento seguimos con las vallas tiradas. A mí hace unos días me entró el perro de un vecino y al final no pasó nada, pero igual que él, puede entrar quien sea; y, además, ahora mismo no tenemos intimidad", afirma la vecina.

Por si fuera poco, ayer, tras salir la noticia en otro medio, varios miembros de la constructora Valle Ultzama se personaron en casa de la afectada para "ver los desperfectos". Al ser preguntados por la vecina si venían de parte de Vinsa, ellos señalaron que no, añadiendo que solamente les habían pedido que echaran un vistazo, para plantear una solución temporal mientras encontraban una definitiva. "Les dije que no quiero que la solución temporal se convierta en definitiva, que es lo que pasará si esto sigue así. Cuando entré a vivir a una VPO sabía que los materiales no iban a ser los mismos, pero eso no significa que lo mínimos no tengan que estar asegurados, como la seguridad y la intimidad. Las viviendas libres de enfrente tenían el mismo vallado que nosotros, y al día siguiente de caerse por el temporal, ya se las estaban arreglando. Todos tenemos derecho a una solución, pero hasta ahora nos han tratado como si les debiéramos algo y eso sólo por el hecho de vivir en VPO", asegura la vecina.