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Vecinos de Lodosa recogen firmas para que las monjas se queden en el colegio

La propuesta será entregada esta semana a las hijas de la caridadSeis religiosas se encargan en la localidad de trabajos educativos y sociales

Vecinos de Lodosa recogen firmas para que las monjas se queden en el colegioa.r.

lodosa. Varias asociaciones y particulares han realizado una recogida de firmas para pedir que las religiosas del colegio La Milagrosa de Lodosa continúen con sus labores sociales y educativas en la localidad. La congregación de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl ha traspasado recientemente la titularidad del colegio lodosano a la Diócesis navarra, hecho que se hará efectivo en el próximo curso. Este cambio de titularidad pone a disposición de la congregación el destino de las seis religiosas que viven en Lodosa, por lo que cientos de lodosanos temen la marcha de éstas. Las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl llegaron a la localidad navarra hace 110 años.

Los impulsores de la recogida de firmas por la continuidad de las seis Hijas de la Caridad viajarán esta semana a Zaragoza para entregar en persona sus firmas a la visitadora de la congregación. Asimismo, han fomentado un envío de cartas y de correos electrónicos a las superioras de la hermandad para mostrar el cariño hacia las seis religiosas y para incidir en su labor social en Lodosa. Logita Aranguren Etxarte y María José García Colomo explican en esta carta que "las últimas religiosas que quedan en Lodosa son un ejemplo vivo de amor incondicional, de perseverancia y de la importancia de la oración". Con todo, agradecían a la provincial, sor Presentación Urricelqui, "el esfuerzo realizado por mantener aquí no sólo la congregación de las Hijas de la Caridad, sino también el centro escolar". También daban las gracias al arzobispo de Pamplona y Tudela, Francisco Pérez, por haber acogido al colegio La Milagrosa en su fundación, "manteniendo el ideal cristiano con el que fue fundado".

Los vecinos que solicitan la permanencia de estas religiosas en Lodosa resaltaban la importancia de la labor social que realizan, tanto en la parroquia como fuera de ella. Además de su labor educativa en el colegio, imparten catequesis y clases de alfabetización a personas mayores; ayudan a la reinserción de drogodependientes; visitan enfermos y ancianos; llevan la comunión a varios domicilios y colaboran con Cáritas. "Y lo más importante, dejan las puertas de su casa abiertas para todas las personas que lo necesitan", recordaba Logita Aranguren.

falta de vocación El principal motivo que argumentan desde las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl para el cambio de titularidad del colegio La Milagrosa es la "falta de vocación en los centros de ideario cristiano". De esta forma, son ya varios los que se han integrado en la fundación creada por el Arzobispado de Pamplona.

María Luisa Esparza, superiora del colegio La Milagrosa, reconocía que para ella era "una satisfacción" saber que muchos vecinos de Lodosa les aprecian. Sin embargo, están a disposición de la congregación. "Yo en concreto llevo nueve años como directora del colegio, tres más de lo normal, y sé que tengo que salir", explicaba la religiosa ayer.