La Cendea de Cizur se une a la de Galar en la petición de "nulidad" del plan de Guenduláin
son los dos municipios en los que se proyecta hacer la macrourbanización El Pleno de Cizur aprueba reclamar a los arquitectos autores del proyecto del polideportivo 72.882 euros por deficiencias
gazólaz. El Pleno del Ayuntamiento de la Cendea de Cizur ratificó ayer por unanimidad de todos los grupos (7 ediles de Agrupación Independiente Cendea de Cizur, 2 de Erreniega, 1 NaBai y 1 PSN) las alegaciones presentadas al acuerdo del Gobierno de Navarra de 11 de enero de 2010 por el que se declara el plan para el desarrollo de un área residencial en Guenduláin como Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal (PSIS). Así, la Cendea de Cizur se une a la de Galar, los dos términos afectados por este macroproyecto, en su solicitud de que se anule o no se apruebe el citado acuerdo.
Respecto a las alegaciones, el alcalde, Josetxo Pérez (independiente), destacó la "inviabilidad jurídica absoluta de la ordenación del área residencial de Guenduláin, por su envergadura y dimensiones, mediante un PSIS". Al respecto, señaló que el incremento no puede superar el "20% de la población o de la superficie de suelo urbanizado del municipio", cuando en este caso supera con creces, ya que Cizur cuenta con 2.838 habitantes y Galar, con 1.568, y se prevé que Guenduláin tenga entorno a 60.000 habitantes. De este modo, el informe señala que por su magnitud excede de los parámetros legalmente fijados para la válida utilización de dicho instrumento de ordenación. Por ello, concluye que el acuerdo "incurre en nulidad de pleno derecho" y se debería realizar "a través de los Planes Municipales. Tenía que ser competencia del Ayuntamiento", añadió Pérez. Cizur se adhiere también a las alegaciones de Galar y en su informe afirma que faltan informes previos a la aprobación inicial para su tramitación como PSIS y que el acuerdo "carece de toda justificación, lo que conduce a su absoluta invalidez". Por su parte, el primer edil incidió en la "confusión" que generará la construcción de Guenduláin en dos términos: "¿quién gestionará eso?", y sobre todo en la "viabilidad económica, que no hay por dónde cogerla. Será un ayuntamiento deficitario en el gasto corriente".
Por otro lado, el Pleno aprobó declarar la responsabilidad de los arquitectos autores del proyecto del polideportivo de Cizur, Jesús Bazal y Rubén Labiano, por una serie de deficiencias detectadas en el mismo, por las cuales les solicitan 72.882 euros. Esta demanda se basa en el informe elaborado por el arquitecto municipal para determinar la solución a los problemas y los causantes. Entre los defectos, se encuentran las ventanas, cuyos herrajes no soportan su peso por su gran tamaño. Según indicó el alcalde, "se cayó una", y se vieron obligados a inutilizarlas, por lo que "no podemos ventilar". Ahora van a poner una parte fija y el arreglo cuesta 28.383 euros. Los arquitectos tienen la posibilidad de recurrir esta resolución. Además, el Pleno habilitó una partida presupuestaria de 100.000 euros para que la constructora Ecay, que realizó la obra, proceda a reparar las carencias.