"Cagancho" eligió la suerte

cinco minutos tardó el mítico caballo de Pablo Hermoso de Mendoza, Cagancho, en repartir suerte. Baldosa tras baldosa, el equino dio vueltas por la plaza de Los Fueros ante la atenta mirada de centenares de personas. Finalmente y tras esos minutos de exhibición, el animal defecó sobre la baldosa 635D y de esta manera hizo que el vecino de Estella, Iván Perusqui se hiciera con los 3.000 euros del sorteo.

El ganador explicó que ahora sólo faltaba elegir en qué gastar el dinero. "Creo que haré una fiesta con mis amigos y el resto lo invertiré en la casa", señaló. Este último extremo también lo confirmó su esposa, Cristina Santamaría. "Lo gastaremos en azulejos que tenemos que comprar", explicó.

El boleto premiado lo había adquirido Perusqui esta semana en la tienda Massada, ubicada en la avenida Yerri. "Fui el martes a darme unos masajes porque tengo la espalda fastidiada y compré el boleto", señalaba. No obstante, además de su número, también resultaron premiados con 150 euros, las otros tres divisiones de la baldosa, es decir, el 635A, 635B y 635C.

Cagancho dio ayer muestras de mantener totalmente la templanza y es que el animal no se sobresaltó en ningún momento, ni durante los aplausos ni con los fuegos artificiales posteriores al premio. Esto se debe según su cuidador, Ismael González a que el equino aún recuerda las plazas de toros. "Está muy acostumbrado a la gente, al ruido y a la música, por eso ha estado tan tranquilo", explicó. González señaló que a fin de lograr el objetivo propuesto, el animal había cenado antes de bajar a Estella. "Normalmente le damos a las nueve de la noche, pero hoy-por ayer- le hemos puesto antes de venir", explicó y señaló que la dieta había sido a base de avena y alfalfa.

todo el día El sorteo que tuvo por protagonista a Cagancho fue el plato fuerte de una serie de actividades que se celebraron ayer como apertura de la Semana del Comercio. Así, la asociación, que es quien organizó todos los actos, repartió a lo largo de todo el día más de 100 kilos de chistorra y más de 300 botellas de vino. Todo ello como consecuencia del tradicional almuerzo de San Andrés, festividad que se celebrará el próximo martes. Durante toda la jornada la Txaranga Cansalmas amenizó las calles y a las 18 horas se encendieron las luces de Navidad.