olejua. Las nieblas y las brumas ofrecían este aspecto a varias localidades del valle de Allín. Tras una noche entera de lluvias el amanecer del pasado martes trajo esta panorámica invernal en la que apenas se aprecian las pueblos y donde no se llega a divisar la sierra de Lóquiz. La primavera avanza hacia el otoño y en Tierra Estella sigue oliendo a invierno. En primer término, un trigal del término de Kisuta de Olejua. A la derecha el término de Sierna de Murieta y a la izquierda, los pinares del monte de Abaigar. Foto: Javier Arizaleta