Producción ecológica, protección de las razas autóctonas y una forma de vida basada en el desarrollo sostenible de nuestros pueblos. Estos componentes son la apuesta firme de Trigo Limpio, una cooperativa de cinco ganaderos del Pirineo que han unido fuerzas para vender sus propios productos: carne de vacuno, caballar, ovino, patatas y kiwis. Productos que respetan el medio ambiente pero sobre todo productos ecológicos que apuestan por un modo de vida que da valor identitario a las zonas rurales. Una apuesta firme por la que luchan día a día, puesto que hace ya tres años que la falta de subvenciones del Gobierno de Navarra les obstaculiza el camino y les hace ver "el futuro pendiente de un hilo".
El pasado mes de diciembre Juan Martín Elizondo, de Aribe; Manolo Andueza, de Oronz; Gabriel Errandonea, de Bera; Maitina Gutiérrez, de Saragueta, y Patxi Antxorena, de Garralda, quisieron unir fuerzas y caminar al unísono en la misma dirección.
Estos ganaderos decidieron crear la marca Trigo Limpio, una etiqueta representativa de productos ecológicos, pero sobre todo una marca que quiere apostar firmemente por la vida en el Pirineo. "Somos de los pocos que estamos ofreciendo carne ecológica en Navarra; hemos apostado por hacerlo en el Pirineo y en el origen de la explotación porque queremos seguir produciendo en nuestros pastos", señala Juan Martín Elizondo, miembro de Trigo Limpio.
Asimismo, según él, lo que diferencia la esencia de su carne, patatas o kiwis no es únicamente el gusto, puesto que "la ventaja no está sólo en el sabor sino en mantener el entorno de manera distinta. Actuar en el medio ambiente de un modo menos agresivo y sobre todo mantener su carácter natural".
Por ello, el ganadero Patxi Antxorena explica que "la producción es más lenta, el engorde es más largo y el animal rinde menos kilos puesto que no estás forzando su forma de engordar". Pretenden trabajar sin utilizar productos químicos que alteren el proceso nativo del ganado, pero también otro de sus principales objetivos es vender su género sin mediadores. "Queremos que la venta sea directa con el consumidor, sin intermediarios y crear así un vínculo de confianza", comenta Antxorena.
FALTA DE AYUDAS "Los comienzos son difíciles, pero nuestro futuro pende de un hilo", declara Juan Martín Elizondo. Tanto es así que los miembros de Trigo Limpio explican que se lanzaron en esta andadura contando con las ayudas del Gobierno de Navarra, pero hace tres años que no recibimos nada". "Mas que nada es el hecho de sentirte apoyado. Encima que apuestas por una forma de vida y te asocias con más ganaderos... Pero seguiremos para adelante", comenta Maitina Gutiérrez.
Tal y como explica Elizondo, "la diferencia económica supuestamente la cubría la ayuda, pero si no la tenemos, o nos veremos obligados a subir el precio al consumidor o a ver quién lo encaja. El coste del kilo final no lo podemos variar y somos conscientes de que estamos manteniendo los precios a cuesta de nuestros propios bolsillos. Entendemos que la calidad se debería de pagar". A pesar de los obstáculos, con una sonrisa recalcan que "continuaremos luchando y haciendo lo que mejor sabemos".
La cooperativa Trigo Limpio ofrece un amplio abanico de productos ecológicos, entre los que se encuentran el lote de ternera de 5 o 10 kilos, el de potro, las patatas ecológicas del Pirineo (25 kilos) o los kiwis ecológicos procedentes de Bera (10 kilos). Todos los pedidos se realizan mediante encargo, demandas que se pueden realizan también por teléfono o a través de su página web: www.carneecologicanavarra.com.