sunbilla - La localidad de Sunbilla volverá a sorprender a los aficionados al herri kirolak (deporte rural vasco) con nuevas y singulares pruebas, que se han organizado por la sociedad Ulibeltzak y el experto Antton Espelosin con ocasión de las fiestas patronales de San Tiburcio. En el programa destaca una modalidad muy antigua y que llevaba décadas sin celebrarse, el arrastre de piedra con burros, además del corte por el campeonísimo aizkolari Mikel Mindegia de un fenomenal tronco de 2,5 metros de circunferencia, y un desafío entre cinco parejas formadas por los mejores aizkolaris de la actualidad que deberán llevar a cabo un extraordinario trabajo; el corte de 16 troncos, diez kanaerdikoak (54 pulgadas) y seis de 60 pulgadas.

Los amantes del deporte rural tendrán ocasión de pasar un buen rato el sábado 9 de agosto, a partir de las 19 horas, en el gran festival. El deporte rural tiene distintas modalidades y los sunbildarras intentan hacer exhibiciones diferentes cada año con nuevos juegos con los que se crea un gran ambiente en el pueblo. Este año habrá una prueba especial, en la que competirán tres burros que deberán arrastrar una piedra de 550 kilos durante quince minutos. Competirán los burros Dakor que llevarán los primos Unai e Igor Bertiz, Isidro al que ayudarán Arkaitz Vicente y Xabier Petrirena, y Bixente al que manejarán Lucio Irazoki y Luis Ibarra.

En otro tiempo, el burro y el hombre han hecho mucho trabajo conjuntamente en los caseríos, y los organizadores están seguros de que esta prueba traerá antiguos recuerdos y será una novedad en la comarca. Un año más, como en las ocasiones anteriores, aficionados de toda la cuenca del Bidasoa acudirán a centenares a Sunbilla a presenciar el espectáculo.

aizkora Sunbilla, cuna del recordado Ramón Latasa, quizás el mejor aizkolari de todos los tiempos, ha concertado con el campeonísimo Mikel Mindegia (el aizkolari con más títulos de campeón de la historia) una demostración superlativa. El de Zubieta, a sus 65 años, mantiene su afición al aizkora y se enfrentará en solitario a un tronco de kana, o sea de 2,50 metros de circunferencia en una prueba que solo han intentado los más grandes de la especialidad. Y para remate, contenderán los que son ahora mismo los mejores aizkolaris de Euskal Herria, con lo que la velada será completa.