villava - La Colonia San Francisco Javier celebró ayer el 25º aniversario de su fiesta anual, un acto de confraternización de los vecinos y la mejor forma de mantener su espíritu de barrio. El multitudinario programa introdujo este año como novedad un posado popular de los vecinos y vecinas de las 41 viviendas que componen el barrio. En esta edición Mikel Sangalo quiso recordar especialmente la figura de la Ángeles, la lechera, que fue el “alma” de la fiesta, así como el arrimo que supuso en aquellos orígenes la implicación de las familias Orayen, Etxegia, Sangao y Etxarte, entre otras, que empezaron a reunir al conjunto del vecindario con una pequeña chocolatada para los más pequeños allá por 1988. A partir de ahí todos los años se han celebrado actividades infantiles y musicales, campeonatos de mus, una comida popular y el homenaje a las personas de más edad. Los ganadores del campeonato de Chinchón fueron Gloria y Vilma, mientras que al mus destacaron las parejas formadas por Uxue-Javier y Félix-Aldaz. Asimismo se hizo un brindis y entrega de flores para las nueve mujeres y diez hombres que quedan de los primeros colonos que llegaron en 1952 cuando se fundó la colonia. Se trata de Carmen Sánchez, Andrea Martínez, Javier Lerga, Vicenta Azcona, Blanca Donazar, Benita Sanz, Gloria Urbiola, Mª Luisa Ayucar y Mª Jesús Ruiz. Pablo Aldaz leyó un emotivo poema para homenajear a los mayores y cantó una jota. El homenaje de este año recayó en Conchi Carnicer Antoñanzas, de 84 años, que estuvo acompañada de sus dos hijos, Antonio y Miguel David Carnicer, y algunos de sus cinco nietos. Natural de Calahorra, Conchi se mostraba orgullosa de los vínculos que han existido siempre en la Colonia donde lleva viviendo desde hace 60 años.
