tafalla - En el marco del proyecto Tafalla por la Salud, puesto en marcha en 2010, los agentes implicados en el mismo (Juventud, Servicios Sociales, Deportes, Centro de Salud, Apymas y centros educativos) han decidido incidir este año en “la importancia de un sueño de calidad y durante un mínimo tiempo para el normal desarrollo físico, emocional e intelectual de nuestros hijos e hijas”. En este sentido, y bajo el hilo conductor de La higiene del sueño, se ha puesto en marcha un programa de actividades cuyo principal objetivo es, precisamente, “promover unos hábitos de sueño saludables”.
Para ello, se han distribuido carteles y folletos relativos al tema (subvencionados por el Instituto de Salud Pública) entre los diferentes centros educativos en los que se describen las pautas que se deben seguir para tener un sueño reparador, tales como llevar un horario regular, meterse en la cama con una iluminación adecuada, evitar pantallas, una alimentación sana, hacer siestas cortas o evitar bebidas excitantes, explicaron las enfermeras Araceli Salinas e Inma Martínez. “Dormir es una necesidad fisiológica”, recordó Martínez, dado que mientras uno descansa se reparan los tejidos, se segrega la hormona del crecimiento y el cerebro clasifica y archiva la información. Además el sueño reparador “previene la diabetes, las enfermedades neurodegenerativas y la obesidad”, enumeró, no sin antes destacar que “conseguir unos buenos hábitos depende de la familia”, de ahí la necesidad de implicar en este proyecto a los adultos con menores a su cargo.
Una de las consecuencias más evidentes de la falta de sueño es el bajo rendimiento escolar. Y es que descansar hace que los txikis tengan más energía, más capacidad de atención, más memoria, hace que su rendimiento sea mayor y que sean más creativos.
En el caso de los bebés, se aconsejan entre 14 y 17 horas de sueño; entre 10 y 13 horas deben dormir los estudiantes de Educación Infantil; entre 8 y 12 horas los alumnos de Primaria; 8 o 9 los adolescentes; y entre 7 y 9 tanto los adultos como los mayores.
“La idea es que este proyecto sea un proceso continuo con este grupo de población (niños y jóvenes), pero también realizar campañas a nivel de población general y extender el proyecto a adultos y ancianidad. En este sentido se trabajará con las Asociación de Jubilados San Sebastián y La Gariposa, siempre con la finalidad de promover el autocuidado y los hábitos saludables, implicando a la comunidad en la tarea”, señaló Salinas.
Por último apuntar que dentro de esta campaña el 27 de marzo alumnos de 4º de la ESO y 1º FP participarán en el Ereta en una actividad intercentros. - A. Izko