pamplona - “Se alquila piso de 107 m2 en planta baja con tres habitaciones, terraza interior y dos baños. Sin amueblar”. Podría tratarse de un anuncio cualquiera, pero la oferta esconde bastante más. La empresa pública Nasuvinsa ha adaptado por primera vez una bajera de uso comercial de su propiedad, situada en el número 14 del paseo de los Enamorados de la Rochapea, como vivienda. Un innovador proyecto piloto “que abre la puerta a ampliar la oferta de vivienda pública en régimen de arrendamiento” y que pretende “dar respuesta a necesidades especiales en la demanda de alquiler, de acuerdo con el principio de accesibilidad universal”, explica el ente público en una nota.

El vicepresidente de Derechos Sociales del Gobierno de Navarra, Miguel Laparra, visitó ayer esta vivienda acompañado por el gerente de Nasuvinsa, José María Ayerdi, el arquitecto David Chocarro y los arquitectos que han desarrollado el proyecto, Javier y Jesús Martínez Oroquieta. Un hogar que está casi casi para entrar a vivir y que acogerá a una familia numerosa en la que alguno de sus miembros presente diversidad funcional o movilidad reducida.

criterios de vivienda pasiva Las obras de adecuación, ejecutadas por la empresa constructora Belate Servicios, ofrecen la particularidad de que han incorporado varias soluciones innovadoras en materia de edificación sostenible y eficiencia energética, basadas en los criterios Enerphit, el estándar que el Instituto Passivhaus dispone para la rehabilitación de vivienda.

El inmueble es energéticamente independiente del resto del edificio e incorpora en su estructura, además de una envolvente térmica, un sistema de ventilación mecánica de doble flujo con recuperación de calor y técnicas de aerotermia para la producción de calor a través de un sistema de suelo radiante. Esto permite que la vivienda tenga altas prestaciones en eficiencia energética.

Dentro de los sistemas de vivienda pasiva, también se ha trabajado especialmente la hermeticidad del inmueble para cerrar el paso a filtraciones de aire y ha utilizado carpinterías de alta eficiencia energética.

Una envolvente térmica eficiente (controlando todos los aislamientos, carpinterías de alta eficiencia, vinilos triples, etc...) que garantice la hermeticidad de la vivienda, así como el control de la ventilación, repercuten en “aproximadamente un 75% de ahorro energético con respecto a una vivienda estándar”, explicó Jesús Martínez Oroquieta, para quien “lo bonito de esta obra, lo interesante, está en lo que no se ve. En esos aislamientos, la hermeticidad, etc.... La vivienda es como si fuera un termo, con una envolvente lo más perfecta posible. Tiene que tener cierta traspirabilidad porque si no no viviríamos a gusto, pero con el concepto del termo conseguimos mantener la temperatura de la vivienda, y con muy poco aporte de energía hacemos que sea confortable”.

Sirva como ejemplo la campana de la cocina, que huye de la extracción para evitar cualquier contacto con el exterior -que repercutiría negativamente en esa hermeticidad- y emplea un sistema de filtro de iones.

cambios en la normativa Una reciente modificación de la normativa de usos en el Plan Municipal del Ayuntamiento de Pamplona abrió la puerta en la capital navarra a compatibilizar usos en los bajos de los edificios y a la posibilidad de reconvertir bajeras en viviendas en aquellas zonas de la ciudad con escasa actividad comercial. Aunque no han proliferado los propietarios que hayan solicitado permiso para esta reconversión, Nasuvinsa se ha propuesto explorar esta vía en sus promociones como fórmula para ampliar la oferta de alquiler social en viviendas totalmente accesibles y muy versátiles en su tipología para atender distintas necesidades especiales.

“marcando un camino” Una vez finalizada la visita, el vicepresidente Miguel Laparra concretó que esta vivienda “se une a la promoción de vivienda nueva, el parque de las 524 viviendas que ahora está en proceso, y también a la propia bolsa de alquiler, que ha tenido un incremento importante. Esta es una vía seguramente más limitada que las anteriores, pero que también suma y ayuda a aumentar la capacidad de respuesta a las necesidades sociales”, consideró.

En este sentido, recalcó la importancia de que “este tipo de locales puedan tener una adecuación para necesidades de accesibilidad para personas con discapacidad o dependencia. Y, por su tamaño, para dar salida a la demanda de familias más numerosas”. Y argumentó que “es una empresa pública como Nasuvinsa la que está marcando un camino, y esperamos que detrás de estas actuaciones también los promotores privados y los propietarios de locales puedan seguir esta misma trayectoria allí donde la normativa municipal lo permita”.

Edificio de Nasuvinsa. La vivienda adaptada ocupa una superficie de 137 metros cuadrados construidos, 107 útiles. Se trata de la planta baja de un edificio que alberga una promoción de Nasuvinsa con 15 pisos de alquiler joven.

Tres nuevas viviendas. En septiembre comenzarán, también en la Rochapea, las obras para adaptar como vivienda otras dos bajeras propiedad de Nasuvinsa, situadas en los números 7 y 9 de la calle Joaquín Beúnza. En Buztintxuri se realizará una tercera intervención de estas características, si bien todavía no se ha realizado el proyecto.

126.000

La adaptación del proyecto presentado ayer ha tenido un coste de construcción de 126.000 euros.