pamplona - La PAH del Casco Viejo ha presentado alegaciones al proyecto de modificación de las ordenanzas fiscales y normas reguladoras de precios públicos para el ejercicio de 2020 en lo referente al impuesto de viviendas desocupadas. Razonan que el impuesto aprobado por el anterior gobierno municipal buscaba incentivar la salida de vivienda hacia el mercado de alquiler “procurando recuperar su función social”. En cambio a propuesta de Navarra Suma el acuerdo adoptado en Pleno el 3 de octubre modifica hasta la tarifa mínima la ordenanza 6 que regula el tributo directo que grava el “incumplimiento de la función social de la propiedad de las viviendas por el hecho de permanecer desocupadas de forma permanente”. El mínimo significa aplicar un gravamen del 0,25% del valor catastral (frente al 0,5% recogido antes) en el primer año, y el 0,50% (frente al 1% acordado), el segundo año. Dicho impuesto aún no se ha aplicado ya que para ello se requiere del Censo de Viviendas Vacías, cuya elaboración depende del Gobierno de Navarra.

Para la PAH, Navarra Suma en el Consistorio ha desistido de “defender el interés público y la función social de las viviendas” ya que la rebaja del impuesto incentiva que “no salgan al mercado habiendo una necesidad tan grande de vivienda de alquiler”. Destacan que las tarifas aprobada en su día no pretendieron un objetivo recaudatorio, ni sancionador, sino “alentar e incentivar los contratos de alquiler en el mercado”, así como “moderar los precios al alza del mercado del alquiler que se están registrando en todo el país y también en Pamplona”. “Visto en positivo, se quiso generar un estímulo para que los propietarios de las viviendas vacías decidan ponerlas en alquiler, de forma que este aumento en la oferta provoque una disminución del precio del alquiler y se desincentiven las prácticas especulativas, ya que los grandes tenedores incumplen reiteradamente el derecho a la vivienda... para especular mateniéndolas cerradas y vacías durante grandes periodos de tiempo, para provocar subidas de precio en los mercados”. El exconsejero de Vivienda Miguel Laparra ya recordó, dicen, que los inmuebles que hoy se encuentran en propiedad de sociedades anónimas o limitadas, es decir, de grandes tenedores, son de 74 personas jurídicas que tienen 20 o más viviendas en propiedad en Navarra. “La propia administración pública, entidades gestoras y fondos extranjeros o nacionales, entidades bancarias, la iglesia... que a nuestro modo de ver no deberían tener vivienda vacía”. - A.I.