- Ha sido una decisión histórica. Desde 1933 no se celebraba la Semana Santa de Sevilla sin cofradías. Y la de 2020 no se vivirá en la calle, es posible que ni siquiera en los templos, por la pandemia global del coronavirus. También en Pamplona la cuaresma se alarga. El prior de la Hermandad de la Pasión del Señor de Pamplona, Luis Javier Fortún, da por hecho que los actos públicos organizados con motivo de la Semana Santa no se podrán celebrar como estaba previsto por culpa de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus y considera que aunque el estado de alarma decretado por el Gobierno tiene una duración limitada de 15 días, lo previsible es que se amplíe otras dos semanas, en cuyo caso es seguro que las restricciones impedirían cualquier acto religioso en la calle, como el traslado de la Dolorosa, la procesión de Jueves Santo o la celebración del Domingo de Ramos.

"No tengo la certeza, pero tengo la convicción de que las celebraciones públicas no se podrán realizar. Aunque el panorama mejorara de forma espectacular en los próximos días y no se prolongara el estado de alarma, no parece razonable pensar que se vayan a permitir inmediatamente después la celebración de las procesiones. En cualquier caso creo que las restricciones se van a mantener hasta después de Semana Santa, lo que nos va a llevar a celebrarla cristianamente de una forma diferente. Pero en Pamplona ya estamos acostumbrados a tener que suspender la procesión por culpa de la lluvia", comentó el prior.

De momento, la crisis sanitaria ya tenido consecuencias en los actos religiosos previos a la Semana Santa, como el traslado diario de la Dolorosa desde San Lorenzo a la Catedral para las 7 misas o el Vía Crucis. Según explicó ayer Fortún, la hermandad ya había llevado a cabo las labores de mantenimiento de los pasos que forman parte de la procesión y se habían realizado algunas mejoras, como el cambio de almohadillas en dos de ellos, y en la iluminación. "Son trabajos que ya están acabados y que se mantendrán. Veremos cómo evoluciona la crisis y las decisiones que se adoptan en los próximos días, pero no soy muy optimista".

El deán de la Catedral de Pamplona Carlos Ayarra comentó ayer que no se ha tomado ninguna decisión sobre los actos tradicionales en Semana Santa (de jueves a domingo) y recordó que se mantienen vigentes las restricciones recogidas en el decreto emitido la semana pasada por el Arzobispado, aunque las parroquias se mantengan abiertas. Como se recordará, el Arzobispado acordó suspender las celebraciones públicas de la eucaristía, aunque se permitía a las parroquias la celebración diaria de la misa con algunas pocas personas convocadas por la parroquia manteniendo una distancia prudencial. Quedaron prohibidas las manifestaciones públicas de devoción, las procesiones y otros eventos de piedad popular. "Los fieles saben que no tienen que ir. No vamos a cerrar las iglesias, no podemos decir a nadie que no puede entrar, pero es importante respetar las restricciones. Veremos lo que sucede hasta entonces, pero estamos pensando en realizar una celebración conjunta el Domingo de Ramos en la Catedral, donde existe espacio suficiente para respetar las medidas de protección sanitaria contra el virus".

Previsible es que dicha celebración sea retransmitida a través de televisión o de otros soportes que ofrece la red, como es el caso de la parroquia de San Lorenzo, que tras suprimir las misas con público por la pandemia, ha habilitado una web (www.capillasanfermin.com) para emitir diariamente el oficio religioso de las 19.30 horas y los domingos, las misas de 13 y 19.30 horas. El párroco Francisco Javier Leoz explicó que la crisis sanitaria ha provocado la suspensión de bodas y bautizos y el interrogante en los niños y niñas que se han preparado para la primera comunión, 90 en total. Comentó que las parroquias y el Arzobispado están estudiando la posibilidad de celebrar, cuando las circunstancias lo permitan, una gran celebración religiosa tras la crisis del coronavirus que se celebraría en la Catedral de Pamplona.

Desde el sector hostelero Nacho Calvo aseguraba ayer que la crisis sanitaria ha hecho que la ciudadanía en general deje de hacer planes. "Todavía no hemos llegado a la punta de la epidemia y a corto plazo no hay movimiento. Ni cancelaciones a lo bestia ni reservas a lo bestia. Había pocas reservas de hoteles y más de campings pero que no se han cancelado. Ahora bien, todo está bajo mínimos. La gente está un poco a la espera", subraya.

A juicio de Nacho Calvo, los pisos turísticos son los que pueden salir mejor parados de este parón turístico ya que al no tener zonas comunes y disponer de cocina pueden adaptarse más a los decretos. Lo cierto es que Navarra es un buen destino turístico y en esas fechas hoteles rurales y alojamientos en general se llenan al cien por cien.

"Los fieles saben que no tienen que venir, es importante respetar las restricciones"

Deán de la Catedral de Pamplona

"Aquí ya tenemos la costumbre de suspender la procesión por culpa de la lluvia"

Prior Hermandad de la Pasión