El Archivo Contemporáneo de Navarra ha puesto en marcha "parada y fonda", un proyecto que reúne mil expedientes de inscripción de hospedajes iniciados en Navarra entre 1939 y 1986, 263 de ellos abiertos ya al público.En abril de 1939 se estableció la autorización obligatoria del Ministerio de la Gobernación y desde 1951 de la Delegación Provincial del Ministerio de Información y Turismo en Navarra para la apertura de cualquier empresa o negocio dedicado al "hospedaje" y fue entonces cuando todos los existentes se registraron legalmente aunque algunos ya llevaban varios años funcionando.

En esa época, fondas, hostales, hoteles, pensiones y casas de huéspedes se situaban en las vías de comunicación tradicionales, herederas de las postas de diligencias del siglo XIX, muchos de ellos regentados por mujeres.

Ahora el Archivo Contemporáneo de Navarra ha iniciado el proyecto "Parada y fonda" con el objeto de dar a conocer la documentación que sobre estos alojamientos conserva en sus depósitos con los inscritos desde 1936 hasta 1986.

Los expedientes de solicitud incluyen un plano del edificio o planta en que se pretendía instalar el establecimiento, con indicación expresa de dormitorios, servicios sanitarios y precios de habitación, desayunos, comidas y cenas, así como memorias, contratos de arrendamiento, cambios de titularidad, bajas e incluso fotografías.

De esta forma la documentación aporta un conocimiento de la realidad económico-social de la Navarra del siglo pasado a través de fuentes hasta ahora poco conocidas, lo que puede dar lugar a nuevos campos de estudio e investigación de la historia más reciente.

Muchos de estos establecimientos continúan abiertos aunque a lo largo de los años han cambiado de titularidad y de nombre.

De los más de 1.000 expedientes que alberga el Archivo Contemporáneo, ahora se han publicado los de 263 "establecimientos turísticos", hoteles de primera, de segunda o tercera, pensiones o fondas, casas de huéspedes y posadas que constituían las distintas categorías en que estos establecimientos eran clasificados atendiendo a la calidad de sus servicios, y la idea es desarrollar el proyecto hasta subir las imágenes de todos

Según indica el Gobierno, conocidos arquitectos firman algunos de estos proyectos, como Víctor Eusa Razquin (Hostal Ayestarán en Lekunberri o el Hotel la Perla en Pamplona), Domingo Áriz Armendáriz (Hotel Gabari en Mugiro o el Hostal Tafalla en Tafalla) o Javier Esparza San Julián (Hotel Residencia Eslava).

Y añade que entre los que continúan abiertos los hay que han cambiado de actividad, como es el caso del Hotel Sayoa en Olabe, que ahora acoge una residencia de mayores, o el Bar Restaurante Catachu en Pamplona, que se abrió como pensión.

También figura en la Plaza del Castillo el Hotel Cisne, cuyo rótulo se conserva aunque cerró en los años 60 del siglo XX.