l Balneario de Elgorriaga hace de eslabón entre el corredor del Bidasoa y el Valle y Universidad de Baztan. Su marco natural es de gran belleza en una mañana, la de ayer, en la que las luces y sombras del día jugaban sin descanso entre los verdores sinfónicos las hayas en sazón. Estos baños de aguas mineromedicinales pasan por ser las más saladas de Europa y manan a una temperatura de 16º. Están indicadas para tratar afecciones dermatológicas, reumatológicas, circulatorias y respiratorias. En la actualidad sus modernas instalaciones hoteleras responden con comodidad al ser del lugar. El agua de Elgorriaga se engalana mediante piscinas de hidromasaje, baños turcos, saunas, duchas para distintos tratamientos, piscina de flotabilidad, galería de reposo y solárium. Y más: cabinas de masaje y gimnasio. Un gozo para el cuerpo y un disfrute en forma de relax y descanso. Todo ello queda enmarcado con el ribete lustroso de la naturaleza. La fusión perfecta: salud y actividades lúdicas disfrutando de las montañas de nuestro viejo estado pirenaico.

El pueblo que acoge este establecimiento termal y al que debe su nombre, Elgorriaga, es el asentamiento poblacional más pequeño del Valle de Santesteban. Esta rodeado por las fuertes pendientes y cimas de los montes Askin y Mendaur y es nutrido por el río Ezkurra.

Las primeras noticias de este manantial de aguas mineromedicinales se remontan a mediados del siglo XIX. El agua salada ya debió de ser aprovechada de forma manual y particular en las últimas décadas de esa centuria. Sin embargo, no fue hasta principios del siglo XX cuando estos baños tomaron asiento de forma gestionada como negocio. Fue en el tercer y cuarto lustro cuando, animados por el creciente vigor industrial y la moda, distintas sociedades mercantiles apostaron por este tipo de negocios. Así, en 1909, se revitalizaron con fuerza los Baños de Fitero y diez años más tarde, el balneario que nos ocupa. Elgorriaga, así, se sumó a la prestigiosa lista de establecimientos medicinales que atrajeron hace 100 años a buena parte de burguesía vasconavarra. La historia del balneario se vio alterada con la Guerra Civil y una dura postguerra hasta que en 1955 cerró sus puertas.

El renacimiento de la estación tuvo lugar en 2009 tras una larga rehabilitación integral afrontada de forma mancomunada entre el Gobierno de Navarra, el Ministerio de Fomento y el propio Ayuntamiento de Elgorriaga.

Hoy, Elgorriaga vuelve a mantener viva su tradición termal de la mano de la cadena hotelera privada. Las saladas y milagrosas aguas nunca dejaron de manar. Ni dejarán de hacerlo con tan bellísimo salero.