De otra manera, los redobles de tambor no faltaron en Lakuntza el día del patrón. Y es que una tropa de cocineros y cocineras txikis tocaron el jueves por la tarde la Marcha de San Saastin, nombre como es conocido San Sebastián en esta localidad, además de otras piezas como Tatiago, Idiyarena y Diana. Aunque este año no hubo ensayos, más de una veintena de txikis mostraron que hay cantera en Lakuntza. Con mucho arte de daba al tambor Ekaitz Areta, de año y medio. Y es que de casta le viene al galgo. No en vano, es nieto de Ricardo Areta, batería jubilado y uno de los artífices de la tamborrada de Lakuntza, cuando un grupo de amigos pensaron en anunciar la festividad de San Sebastián con redobles, al que igual que se hacía en diferentes localidades de Gipuzkoa. Año tras año, desde 1990, este acto no faltaba en la plaza, hasta que la pandemia lo cambió todo.
Precisamente, la tamborrada txikis suele ser la víspera, pero dada la situación actual, el Ayuntamiento pensó en que fuera el día grande de estas fiestas de invierno, que tras un año de parón, han vuelto en formato covid. Así, los actos son mañana y tarde al aire libre. También ha habido cambios en los auzate, los almuerzos y meriendas que el Ayuntamiento ofrece todos los días. Para evitar aglomeraciones, en vez de acudir a la mesa a servirse, las y los concejales reparten el queso, pan y vino entre los grupos.
Los tambores dieron paso a los bailes, con los dantzaris txikis de Elai Alai y después jóvenes de Biltoki bailaron la Alkate dantza una danza de Lakuntza que se baila en dos fechas destacadas, el Corpus y el día de San Saastin. Desaparecida la costumbre cuando se dio el salto a una sociedad industrial, la recuperó en los años 80 Emilio Andueza. “Antes se bailaba diferente estos dos días pero desde que se recuperó, es igual”, observó el alcalde de Lakuntza, Patxi Xabier Razkin. “Antiguamente el Ayuntamiento estaba sentado en una mesa y después del baile ofrecía piperopiles a las chicas”, apuntó. Ayer también fue la romería a la ermita de San Saastin, dónde no faltó un buen almuerzo.
Las celebraciones continuarán hasta el domingo. El viernes habrá castillos hinchables mañana y tarde, auzates y música en la plaza con Oihan Vega. El sábado se unirán a la fiesta los gigantes de Lakuntza. De la música se encargará Trikidantz. El programa finalizará el domingo con un festival en la plaza, a partir de las 13.00 horas.
Concurso de piperopiles la víspera
Las celebraciones comenzaron el miércoles con el lanzamiento del cohete, a cargo de la concejala Rita Torrico Muniz, animado por la txaraga de la Escuela de Música de Lakuntza. Además, para entrar en calor hubo chocolatada. Asimismo, se celebró una nueva edición del concurso de piperopiles, tortas de anís que se cuecen al arrimo del fuego y son típicas de estas fiestas. Se presentaron diez. Lo cierto es que el jurado, formado por Blanca Esther Andueza, Tania Gamboa, Mari Carmen Maiza y Jone Flores, no lo tuvieron fácil. “Todos están muy buenos”, aseguraron. Finalmente, la ganadora fue Cristina Razkin, que ha hecho lo propio en varias ocasiones. Mila Reparaz fue segunda y Malen Arraiza tercera
