Los vecinos de Olaiz denuncian que la futura variante proyectada en Olave, sobre la N-121-A, parte su pueblo en dos. El viernes se manifestaron para exigir al departamento de Obras Públicas una alternativa, y seguirán protestando todos los viernes en busca de “la mejor solución a este despropósito. Variante sí, pero no así”, dicen en un comunicado remitido al Ayuntamiento de Olaibar, Obras Públicas y Parlamento.

Los 37 habitantes del concejo muestran su “estupor y rechazo” por el proceso. Y destacan que “no es una carretera, es una autovía de cuatro carriles. Al concejo lo seccionan en dos”, lamenta su presidente, Ángel Chocarro, sobre un “proyecto bestial”.

Vecinos de Olaiz, en la protesta del pasado viernes. cedida

Las alternativas

El concejo recuerda que, antes del último proyecto (octubre de 2021) se barajaron varios trazados: “Por encima de Olave sin cruzar el río Ultzama; por encima de Olaiz cruzando dos veces el río; y por en medio del concejo de Olaiz, seccionándolo, desde cerca de la presa de Sorauren, hasta el final en el caserío Osabide cruzando dos veces el río Ultzama”. “Como era de esperar, se nos informó que las dos primeras opciones eran económicamente inviables y que la más racional era la tercera. Todas las alternativas contemplan una vía de 2+2. En la actualidad sería el único tramo de la N-121-A con este diseño, bastante llamativo en pleno proceso de 2+1. A fecha de hoy no nos han facilitado explicación a la disposición 2+2”, dicen.

El concejo se pregunta “¿por qué la variante no puede ser a semejanza de las de Ostiz y Olague, sin cruzar el río, sin puentes, cara este soleada y sin heladas ni inundaciones, terreno firme, etc? Secciona los terrenos del concejo en dos, con una 2+2 que necesita una anchura de hasta 40 metros más, destruyendo el poco terreno agrícola que existe en el valle y afectando gravemente al equilibrio medioambiental de la zona”.

También explican que los técnicos de Obras Públicas plantearon una alternativa que, si bien sigue cruzando el río, “discurre más cerca del río Ultzama y no necesita subir las laderas del monte de Olaiz y desmontar el concejo con trincheras sujetas a heladas y derrumbes y desde luego, mucho menos agresiva”.

Sin embargo, el concejo de Olave “no quería el nuevo trazado y ninguna alternativa salvo la que discurre entre Olave y Olaiz y lo más alejada de Olave. Los que hacía un año decían que había que salvar 70 metros de casco urbano y con una simple solución técnica, están felices con una variante de varios kilómetros, 2+2, dos puentes y claro… lejos de Olave y sin importarles las consecuencias en sus vecinos de Olaiz y de las repercusiones ambientales que se generan. Imposible el acuerdo Olaiz-Olave”, argumentan.

Pancarta criticando la actuación del departamento de Obras Públicas cedida

Por último, destacan que “la variante es importante para Olave, en ningún caso los trazados son perjudiciales para su concejo. Sin embargo las soluciones propuestas, todas, son perjudiciales para el Concejo de Olaiz”. Censuran que durante el proceso hasta dar con el proyecto definitivo “no se nos ha respetado como Concejo”. Por Obras Públicas, que “ha olvidado soluciones viables con respaldo técnico”, y por parte del Ayuntamiento de Olaibar por “tomar parte por unos vecinos e ignorar nuestras solicitudes”. Y piden al Gobierno de Navarra una “justificación” del cambio de trazado y al Ayuntamiento “que nos representen y nos protejan y que exija el menor impacto de la variante en los vecinos del Concejo de Olaiz y en el medioambiente del Valle de Olaibar”.

"Olaitz no se rinde" y seguirán protestando todos los viernes. cedida