Barbarin es otra de las poblaciones de las señaladas por las estadística como “sin niños” en su censo y una de las localidades que más rápidamente ha cabalgado hacia la despoblación, pasando en poco más de medio siglo de los rozar los 200 habitantes a los 48 actuales. Un descenso que según explican desde el ayuntamiento también tiene que ver con la manera de ser de la gente del pueblo: “apenas hay casas a la venta y muchas de ellas son de mujeres u hombres mayores que viven en ellas y que reciben aquí a toda la familia en diversas fases del año haciendo que los originarios de Barbarin no pierdan su arraigo.

Para Carmen Puerta la clave para la recuperación de la población y que se apueste por que los niños y niñas vivan en el futuro en Barbarin, está “en los servicios que seamos capaces de ofrecer. Por eso, por ejemplo, “hemos creado un coworking donde pueda haber emprendimiento y trabajo on line”.

También es una localidad que ha apostado por rehacer totalmente el centro cívico como lugar de reunión de los jóvenes de la zona. Entre los servicios que pueden ofrecer en el futuro, tienen claro que las energías renovables formarán parte de ellos y de ahí la creación de una comunidad energética; es el proyecto en el que están trabajando actualmente y que ha reunido a 17 propietarios de viviendas y del que “ya hay un grupo tractor que está llevando el tema”. Entre las propuestas inmediatas está la creación de un pequeño complejo deportivo que incluiría una pista de pádel, un gimnasio y una sala de masajes, “que pueda dar trabajo a gente de la zona”, comentó Carmen Puerta, que en su primera legislatura como primera edil está convencida de que a Barbarin vendrán más niños porque la estamos dotando de servicios que complementan los servicios de otras localidades de la zona.

De momento, la realidad de esta pequeña población es tozuda e indica que las personas más jóvenes ya no son niños. “Las dos más jóvenes tienen 19 y 24 años”, señaló Puerta quien está convencida de que en poco tiempo la localidad se saldrá de los fríos datos estadísticos y que “es posible que contemos con 6 vecinos nuevos”, lo que ya puestos a recurrir a los porcentajes supondría un incremento de más de un 12% de la población con la llegada de una sola familia.

Entre los proyectos arrancados por la iniciativa privada, también está el de la puesta en marcha esta primavera de un hospedaje rural que contará con servicio de comedor. También destacó Puerta que, al igual que el cuidado de la plaza de los Poetas, se fomentará el parque de los columpios existente en la localidad, en el que “estamos esperando a que llegue el primer niño para que pueda jugar en ellos”, añadió Puerta, quien aseguraba que “la apuesta fundamental de su ayuntamiento serán las personas que han apostado por vivir en Barbarin. “Cuantos más servicios consigamos, sin que se nos vaya la olla, más fácil será que en un futuro cercano esas casas que hoy están habitadas por personas mayores y son nuestro objetivo prioritario, tengan su relevo generacional con gente joven”, finalizó Carmen Puerta.