Decenas de jóvenes se reunieron el sábado en Tafalla para llevar a cabo las jornadas Laiatzen, un proyecto organizado por Tafallako Gazteak, Euskaltzaleen Topagunea, Agerraldia y ciudadanía de diferentes pueblos y que tiene la finalidad de activar e interrelacionar a los jóvenes de la Zona Media y Sur de Nafarroa.

El sábado fue el broche final a una primera fase de la intervención pero también un punto de partida para llevar a cabo proyectos comunes entre los diferentes grupos y movimientos de la zona. “Estas jornadas surgen de la identificación de una necesidad por parte de los jóvenes de la zona de crear redes entre ellos y conocerse porque hay diferentes proyectos que no tienen relación entre sí y movimientos que no se conocen y que tienen problemáticas comunes”, explicaron los miembros de Euskaltzaleen Topagunea.

Tras poner en común entre Euskaltzaleen Topagunea y el Gobierno Foral el interés de realizar una intervención con la juventud de la zona, esta agrupación comenzó a darle forma y sentido a la idea. Uno de los hitos del proceso fueron las jornadas organizadas por Agerraldia el 5 de noviembre en Azkoien, donde los y las jóvenes pudieron encontrarse y comenzar a identificar las necesidades actuales. “Las incorporamos al proyecto e hicimos uso de ellas para nutrir el proyecto. En ese primer encuentro es cuando se apuntaron los y las jóvenes de la zona y vieron que necesitaban juntarse más y darle la vuelta a proyectos comunes con unas necesidades colectivas a las que querían darles forma”, relataron.

Tras ese primer encuentro, los colectivos empezaron a trabajar desde el lugar, identificando personas y movimientos concretos para crear un grupo motor para realizar estas jornadas.

Algunas de las participantes de la jornada durante las actividades de la mañana.

En cuanto a la necesidad de realizar a estos actos en la zona, los jóvenes explican que la distancia que hay entre la población es una de la mayores trabas para la interrelación. “En la Zona Media las distancias mucho mayores y la población es mucho menor, por lo que la gente joven sensibilizada con el euskera o con ciertos temas, esta alejada entre sí. Si no comparten espacios, como sí pasa en otros sitios, les cuesta más conocerse y llevar a cabo esos proyectos”, aseguraron. Por lo que el objetivo principal de la jornada del sábado fue lograr herramientas para que los jóvenes puedan coordinarse.

Las actividades

El día comenzó con unos talleres reflexivos en los que la juventud trató cinco temas de interés. El proyecto se inició con una primera parte en la que se trabajaron los retos del euskera en la Zona Media y la creación de redes entre los jóvenes y los movimientos de sus municipios.

Tras ello, los grupos desarrollaron tres vías: La creación de redes en el feminismo, la generación de un espacio para que creadores de la zona puedan establecer puntos en conjunto con organizadores y la puesta en común de los retos de la juventud hoy día. “Esta última fase trató de una mesa redonda entre diferentes representantes de distintos colectivos para poner en común diferentes retos que tienen cada uno y ver en qué punto se unen y qué opciones colaboración tienen”, explicaron los organizadores.

Tras esos talleres, las decenas de jóvenes realizaron una comida en el Frontón Ereta, a la que le siguió una sesión de bingo y una posterior kalejira con juegos a través de la Ciudad del Cidacos.

Para culminar la jornada, los colectivos organizaron un espacio de ocio en el mismo frontón en el que actuaron Broken Brothers Brass Band, Sutan Ortzi, Burutik, Hofe y DJ Kiliki Frexko, grupos y artistas musicales que atrajeron a centenares de jóvenes de todas las partes de Nafarroa.