El penúltimo pleno de Estella-Lizarra sirvió de ejercicio preelectoral
Las cinco fuerzas representadas del Consistorio jugaron sus bazas mirando a las urnas del 28 de mayo
Las trompetas de la campaña electoral sonaron en el salón de plenos del Ayuntamiento de Estella-Lizarra, donde los partidos hicieron guiños y amagos de cara a las urnas.
Fue en este contexto en el que habría que señalar la sesión de Navarra Suma, con Marta Ruiz de Alda, futura candidata de UPN, que sacó a relucir un clásico: la situación de la capilla del Hospital Viejo, de propiedad municipal, cedido legalmente a la asociación Lizarrako Gasteak. Una solución que pese a eliminar los problemas de ilegalidad, solo convenció a EH Bildu para cuyo concejal Unai Errazkin: “nos vimos en la obligación aplicar el marco legal de la ordenanza municipal para resolver el problema y eso es lo que hicimos”. Una opinión que no terminaron de apoyar sus socios: los dos concejales no adscritos que funcionan ya con la marca de Por Estella; ni el concejal de Geroa Bai, Pablo Ezkurra, que recriminó a sus compañeros qué hubiera pasado si mientras lo ocupación ilegal del inmueble “hubiera habido un incendio?”. La abstención de estos tres concejales abrió el triunfo para que el único concejal del PSN sirviera para sacar la moción electoral de Navarra Suma.
Por contra, otra moción aprobada fue la presentada por EH Bildu en nombre de distintas asociaciones, instando al Gobierno de Navarra -a través del Instituto Navarro de Igualdad- a recuperar la atención integral a personas LGTBIQ+, esta vez al voto negativo del PSN no le sirvió la abstención de Navarra Suma por lo que la moción salió adelante con el equipo de Gobierno. Los primeros escarceos cuerpo a cuerpo de ayer en Estella-Lizarra no salpicaron las urnas; digamos que fueron demasiado pesados y acabaron aburridos y en tablas.