El 20,35% del padrón de Aoiz lo forman personas de nacionalidad extranjera

El estudio presentado recientemente en la casa de cultura por sus componentes, Celia Kohn Beruete, Iker Burgos González, Irati Zunzarren Avelino, reveló asimismo, que este dato se ha visto incrementado desde 2018, año en que se situaba en un 13, 18% (según el INE), si bien el dato era inferior al contemplado en el ayuntamiento. Esta fue la razón, explica la consultora, que impulsó a la elaboración del diagnóstico.

El objetivo general del estudio era conocer la realidad social de la población migrante que vive en la villa. Los objetivos específicos: caracterizar los diferentes perfiles de la población migrante, tanto desde el punto de vista sociodemográfico como desde el punto de vista del uso de servicios y recursos disponibles en el pueblo. Detectar las necesidades y demandas en la utilización de dichos recursos y servicios; conocer la percepción que tiene la población migrante sobre Aoiz e identificar las líneas de actuación posibles que contribuyan a lograr la integración por parte de la población migrante y la aceptación por parte de la población autóctona, favoreciendo el ambiente de convivencia.

Irati Zunzarren: “Las personas migrantes valoran Aoiz de manera muy positiva”

“Nos hemos encontrado un perfil muy diverso con predominio de personas procedentes de Rumanía, Norte del Sáhara, y de Sudámerica. Su percepción de Aoiz es muy positiva por la cobertura de servicios, la tranquilidad y la calma que se respira en el pueblo. Esta tranquilidad proviene de la seguridad que sienten, principalmente durante la crianza de sus hijas e hijos”, explica Irati Zunzarren.

Este hecho, asegura, compensa lo negativo, que es la falta de vivienda y empleo. En este campo se incrementa la brecha en el caso de las mujeres que dependen totalmente de sus maridos, incluso para desplazarse a los posibles puestos de trabajo. En este sentido, el diagnóstico recomienda al Ayuntamiento y al SNE la necesidad de formación específica para las personas inmigrantes, sobre todo para las mujeres refugiadas; potenciar su aprendizaje para facilitar su inserción laboral.

Otra de sus recomendaciones como posible línea de actuación que contribuya a lograr la integración de la población migrante y la aceptación de la local, es la elaboración de un plan de convivencia participado con la población inmigrante y la autóctona. “En este momento estamos viendo la viabilidad de estas propuestas y ultimando detalles del informe”, dice Zunzarren. La metodología empleada, comenta, “ha sido una combinación de técnicas cuantitativas y cualitativas: análisis estadístico para hacer la caracterización del fenómeno migratorio, entrevistas a agentes clave de los diferentes recursos y servicios de Aoiz, mapeo de recursos y grupos de discusión”.

Zunzarren destaca la predisposición de todas las personas a participar y la buena acogida del estudio entre la población migrante. “Ha habido una gran participación, y eso que montar grupos de discusión no es fácil. También de todos los servicios y desde alcaldía. Su colaboración y su perceción han sido fundamentales para hacer el estudio más integral”.