Tintineo de campanas, acordes de guitarras, bandurrias y laúdes, y notas de acordeones, clarinetes y saxofones han sonado a los cuatro vientos por las calles de Azagra con motivo de la XLV Concentración de Auroros de Navarra, una cita que ya celebraron allí hace 27 años, y que ha reunido desde primera hora de la mañana a más de 2.000 personas.
De acuerdo con el grupo de auroros de la localidad ribera, “todo ha ido fenomenal porque ha salido una mañana espectacular, que era lo que más nos preocupaba; la gente es mayor y nos daba miedo la ola de calor. Además, el acto inaugural ha sido muy emocionante”.
Y es que pasadas las 8.00 horas y, tras la recepción y bienvenida, han interpretado todos al unísono, y junto a la banda y a la coral azagresa, el Himno de las Cortes de Navarra y Salve Aurora María.
Calles llenas de música
Con el municipio dividido en cinco, los 66 municipios de Navarra, Cataluña, Valencia, Aragón, La Rioja y País Vasco que han participado en esta cita se ha ido repartiendo por las calles y comenzado a cantar bonitas auroras y salves en muchas ocasiones con letras que hacían referencia a sus localidades de origen. Por ejemplo, en la zona de la basílica han estado, entre otros, los auroros de Villafranca o los de Tolosa, que han interpretado una Salve Rociera en euskera. Por otro lado, un joven sartagudés se ha arrancado con una jota y, en la calle de al lado, alguien gritaba a pleno pulmón: “¡Aúpa la pandereta, aúpa Monteagudo!”.
Los auroros de Sangüesa han asegurado estar “pasándolo de maravilla”, mientras que quienes reponían fuerzas en algunas de las 10 mesas que han colocado con bebida y comida han recalcado “lo buenísimo que está todo”.
De acuerdo con los anfitriones, “todos los pueblos han venido e incluso a última hora se apuntaron tres más que hemos podido encajar. Estamos encantados; todos han disfrutado”. En este sentido han apuntado que “es algo que ha merecido mucho la pena. Todos estos acontecimientos tienen ese desgaste típico que conlleva el tener que preparar todo, pero una vez que llega la hora y estás ahí con toda la gente, el trabajo ha merecido la pena”. Ellos, que solo han cantado en el acto inaugural y en la eucaristía con la coral, han estado durante toda la mañana pendientes de los recorridos, de las mesas, de si faltaba comida para reponer, etc.
Agradecidos
“Superamos, con mucho, las expectativas que teníamos. Lo principal, además, ha sido la aportación y colaboración del Ayuntamiento, los patrocinadores y de todos los vecinos del pueblo, que se han volcado con las mesas, los carteles y los desayunos. Estamos encantados y que todo el mundo sepa que estamos súper agradecidos”. Y es que unos 300 azagreses han ayudado a que todo haya salido a pedir de boca.
Para terminar, unas 400 personas han comido en el frontón mientras que otras muchas lo han hecho en restaurantes del municipio y de la zona.
