La plaza Santa María de Lumbier acogió ayer una nueva edición del Día de la Tostada/Tostadaren Eguna donde centenares de personas degustaron el primer aceite del año.

Lumbier cuenta con olivos centenarios y de nueva plantación, La Piedra, El Lardín, Bijués debajo de La Peña o Saso Tabía son algunos de los parajes donde crecen las olivas para elaborar este aceite. Esta fiesta ya consolidada tras nueve ediciones tiene lugar entre Semana Santa y San Isidro. El grupo de olivareros comenzó a celebrar este día con el que “ofrecer el sabor que nos da la tierra”. El aceite, el pan, los ajos y la sal fueron los protagonistas de la mañana y las tostadas se degustaron con vino de la zona.

El sonido de la txalaparta dio comienzo a la fiesta y, a continuación, Blanca Eslava y Antonio Echeverria, colaboradores imprescindibles desde el comienzo, recitaron versos y refranes sobre la oliva y el aceite que “transmitían la sabiduría popular de generación en generación y que guardan gran información”.

Como es costumbre, el grupo de olivareros realizó un homenaje para poner en valor la dedicación desinteresada de una persona o grupo local. Esta vez, el agradecimiento fue dedicado para el CD Ilumberri, que el año pasado celebró su centenario: “No queríamos dejar pasar esta ocasión sin reconocer al equipo su andadura y la visibilidad que da a Lumbier”, afirmaron. La organización hizo entrega de una hogaza de pan y aceite a Alfonso Santacilia, ex-presidente del club, quien se mostró ilusionado por el detalle: “Quiero agradecer al grupo de olivareros por acordarse del Ilumberri en su celebración y también por la labor que realizan por el pueblo”, declaró.

El Día de la Tostada/Tostadaren Eguna es una jornada para poner en valor la tierra, las costumbres y el pueblo. Desde el grupo de olivareros hicieron hincapié en la importancia de la participación social y el relevo generacional: “Tenemos colegio, ikastola, txaranga, gaiteros, deporte. Tenemos que arrimar el hombro, sobre todo la juventud, hay que hablar y organizarse para seguir con las tradiciones. Amarraos al pueblo, porque Lumbier siempre va a ser el beneficiario”, concluyeron.

A la cita no faltaron colaboradores habituales como Ilumberriko txaranga, Irunberriko gaiteroak y txalaparta. En esta novena edición también participó el grupo jotero Sabor Navarro. El toque musical también lo dio el cantautor Jesus Aiesa, acompañado por Irune Aiesa y Koldo Pastor, quien también destacó en sus letras el valor de la tierra. Una jornada festiva para valorar la gastronomía y la cultura popular.