Aunque no está claro el origen real de la romería a Ujué, el domingo siguiente a San Marcos (25 de abril) es el pistoletazo de salida a las peregrinaciones al Santuario de la Virgen de Ujué que se prolongan durante todo el mes de mayo. Tafalla, Beire, Pitillas, Santacara y Murillo el Fruto son las primeras localidades en visitar a esta virgen tan morenica y galana; lo harán este domingo 28 de abril. Rubén Sánchez, alcalde de Ujué, cuenta cómo se prepara “una de las fiestas más importantes del año en la localidad”.

Un año más, Ujué acogerá a cientos de romeros que acudan en peregrinación. ¿Cómo recibe a localidad a estas personas?

Recibimos a todos los romeros y personas que acuden a las celebraciones con los brazos abiertos. Somos un pueblo muy hospitalario y estamos encantados de acoger a la gente. Los bares y restaurantes de Ujué están preparados para ofrecer al público nuestros productos más típicos, desde las almendras garrapiñadas, hasta migas, otros dulces o vinos, así como un espacio donde descansar después de toda la caminata.

Como ayuntamiento, sin embargo, nos tocan actos más institucionales. En esta ocasión, lo único diferente, o diría que anecdótico, es que al haber cambio de corporación en Tafalla, nos reuniremos con ellos para explicarles y guiarles en lo qué va a consistir el día: el lugar donde hacemos el cambio de vara, el cambio de capa de los sacerdotes, etc. 

Rubén Sánchez, alcalde de Ujué, durante la romería de 2023. Endika Iriso

Por otro lado continuaremos con el acto de hermanamiento habitual. Es decir, desde que entramos en el Ayuntamiento en 2015, hemos invitado a todos los pueblos que participan en la romería, no ese día solo sino en todas las romerías, a un pequeño lunch en el Consistorio; pasamos el rato, nos conocemos, nos contamos nuestros problemas, que muchas veces son comunes y creo que es un acto que gusta en los pueblos.

¿Notas diferencias en cómo se celebraban estas romerías hace 20 - 30 años a cómo son hoy en día?

Sobre todo en la masificación. La reforma de la procesión de los pueblos y la división en los días de peregrinación, hace que se note esa menor afluencia. También pienso que el laicismo, que va incrementándose en la sociedad, hace que se vea reflejado en parte en este día. Aunque he de confesar que muchas personas declaradas como laicas me han dicho que ese día no se lo pierden. Esa es también la magia que tienen estas romerías.

¿Cómo ha empezado el año en Ujué? ¿En qué se está trabajando desde el Ayuntamiento?

Al final, siempre lo decimos y me reitero, nuestro caballo de batalla es la lucha contra la despoblación. Más allá de que nos vengan ayudas exteriores, lo que nosotros nos pusimos en hoja de ruta era aumentar el bienestar del pueblo a través de incrementar las actividades culturales y lúdico-deportivas. Queremos que Ujué sea reconocido como un pueblo amable para estar, para vivir. 

Es por ello que ya estamos sumergidos en la preparación de todas las actividades, cursos y conciertos que llevaremos a cabo, como son los cursos de verano en colaboración con la Upna, la noche en vela. Paralelamente, gracias a las subvenciones y otras ayudas, tenemos previsto para este año arreglar los bajos de las escuelas y el tejado de la ludoteca.

"Nuestra hoja de ruta siempre ha sido aumentar el bienestar del pueblo a través de actividades culturales y lúdico - deportivas"

Lo más duro de vivir en estos pueblos es el invierno. ¿Cómo lo afrontáis?

Efectivamente. Como dices, los meses más duros siempre son después de navidades y hasta semana santa. Ahí si que se ve la verdadera despoblación. Por eso mismo, para animar de alguna forma la actividad en la localidad hemos estado colaborando con la Asociación de Mujeres, la cual se ha constituido recientemente. Han entrado con gran auge, hemos hecho diferentes charlas y colaboramos con la proyección de una película.

¿Los esfuerzos que estáis poniendo en la lucha contra la despoblación están teniendo su recompensa?

Podemos decir que sí. Cuando entramos a trabajar en el ayuntamiento en 2015 teníamos la sensación de que el pueblo estaba apagándose, muriéndose poco a poco. Consideramos que al menos los fines de semana, días festivos y durante la época veraniega hemos conseguido darle vida

No obstante, nuestra asignatura pendiente sigue siendo el día a día. Tenemos que dar con la clave para atraer a familias con hijos; que estas decidan instalarse de forma más permanente. Aunque tengo que decir que sí que hemos obtenido, a través de las casas de los maestros, el aporte de varias familias a la escuela rural, que también era uno de nuestros objetivos, el que la escuela rural no se muriera, siguiera activa. 

Hemos conseguido parar ese descenso en picado de población del cual veníamos en los años atrás, previos al 2015 y quizás potenciados por la crisis económica que sufrimos. Ahora hemos conseguido que esos números se estabilicen, e incluso le hemos dado una ligera vuelta a lo que es la gráfica de la despoblación, pero por supuesto que nos gustaría que fuera estos avances más importantes.

¿Qué valoración haces de la semana santa en Ujué?

Tradicionalmente los días de semana santa son siempre los días donde más aglomeraciones hay de todo el año, incluso mucho más que en verano. Esta semana santa no ha sido una excepción. Sí que a lo mejor el tiempo ha podido paralizar un poco que la gente se mueva, pero hablando con los hosteleros, nos dicen que ha habido gente para comer en segundos y terceros turnos. Quiero decir, que la afluencia ha sido mayoritaria. 

¿Cuáles son las ventajas de vivir en una localidad rural como Ujué?

Son muchos, pero la cercanía que tienes con el medio natural, la oportunidad de hacer actividades en la naturaleza, sea BTT, sea senderismo en la puerta de casa. Yo creo que la tranquilidad y el ambiente familiar que se respira en el pueblo es lo mejor: vas al bar o la sociedad y puedes estar hablando perfectamente con un niño de 4 años o una persona de 90. Esos son los beneficios a nivel humano son los que hacen de los pueblos lugares maravillosos para vivir.