Aurizberri-Espinal volvió a llenarse de ritmo y emoción este sábado con la celebración del Día de la Música, una jornada muy especial que lleva ya 29 años poniendo en valor la tradición musical de este pueblo pirenaico.
La lluviosa mañana arrancó con la salida de gigantes y txistularis al frontón, donde se organizó un acto en apoyo a Palestina, que conllevará la plantación de un olivo. Una vez en la iglesia, hubo un concierto a cargo de varios músicos y dantzaris locales, el grupo de txistularis y el coro Auzperri Abesbatza.
Tras el recital, el ambiente festivo continuó con un vermú popular amenizado por la fanfarre Fan eta Farre y con una comida popular. Ya por la tarde, el frontón acogió un kantaldi informal, culminando la jornada con talos y con una gaupasa en el bar Ederrena.