La convivencia en Estella-Lizarra copa el debate de la corporación

El pleno de Estella-Lizarra, liderado por Ana Duarte por la ausencia de la alcaldesa Marta Ruiz de Alda, llegó a su punto álgido una vez que terminaron de debatir los puntos del orden del día. Y es que fue el momento de las mociones, tres en concreto, y todas ellas sobre la convivencia en la ciudad del Ega. En primer lugar, la de Geroa Bai (no aprobada por la negativa de UPN, PSN y PPN), y cuya portavoz, Blanca Regúlez, defendió alegando que “la convivencia se trabaja con la creación de foros, la participación, políticas públicas y con cesiones de todos y todas; no con el inmovilismo de posturas”. Por otro lado, la que EH Bildu y Contigo-Zurekin presentaron de forma conjunta (también rechazada), y en la que aseveraron que “se deben dar pasos hacia la disminución de la tensión generada”. Además, instaron al equipo de Gobierno a una reflexión sobre el modelo de gobernanza de estos años, a la creación de un foro y a la retirada de la personación del Ayuntamiento de Estella-Lizarra en el proceso de la Bajadica.

Y, por último, presentó la suya el PSN (rechazada), y con la que afirmaron que la pluralidad de la ciudad es una fortaleza que “debemos proteger, promover y convertir en motor de cohesión y progreso. Ninguna discrepancia ideológica ni expresión de descontento pueden justificar ataques contra la dignidad o integridad de las personas”. Desde UPN, además, leyeron un texto en el que aseguraron que “esto no son propuestas de convivencia, sino una operación política para deslegitimizar al Ayuntamiento, debilitar sus decisiones y blanquear la desobediencia organizada que se vivió. Estas mociones presentadas como propuestas de paz, encubren una estrategia de impunidad”.

PROYECTO A FUTURO

Por otro lado, y ya fijado en la hoja de ruta de la sesión, a las puertas se quedó un proyecto que lleva más de una década guardado en el cajón, y es que, a pesar de que en el orden del día aparecía la aprobación de la declaración institucional de apoyo al proceso de declaración de la ciudad de Estella-Lizarra como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, una apuesta que hace años no llegó a buen puerto, y tras debatirlo brevemente, se quedó sobre la mesa a expensas de analizarlo un poco más y sacarlo de nuevo a colación en la próxima sesión plenaria. La corporación municipal, además, leyó una declaración institucional con motivo del Día LGTBIQ+ y acordaron establecer un plan estratégico y habilitar los recursos necesarios para su implementación, colocar la bandera en espacios públicos de la ciudad y organizar actividades y campañas de información.

FALTA DE ACUERDOS

El pleno, además, rechazó una serie de modificaciones presupuestarias por valor de 84.754 euros que presentó el equipo de Gobierno y que solo aprobaron UPN y PPN. Y es que, EH Bildu, el PSN, Contigo-Zurekin y Geroa Bai se mostraron reacios a utilizar el remanente para dichas acciones e insistieron en que “los proyectos se pueden acordar de otra manera, con otros plazos y otros objetivos”, y le recordaron al equipo de Gobierno que tienen que “llegar a acuerdos si quieren llegar a algún tipo de acuerdo”. Por último, el pleno abordó y, en este caso aprobó con los votos de UPN, PSN, Geroa Bai y PPN los precios públicos de la escuela de música Julián Romano Ugarte con una rebaja, en este caso, por segundo instrumento y al alumnado adulto. Sin embargo, EH Bildu y Contigo-Zurekin se mostraron contrarios alegando que dicha reducción tenía que ser para todos y que hay que revitalizar más estos estudios.